Ir a una sex shop por primera vez puede ser una experiencia, cuanto menos, diferente a cualquiera que hayas tenido. La mayoría de la gente siente un poco de aprensión, por temor de que le vean entrar, o encontrarse con alguien conocido dentro.
Algunos se sienten tontos al hacer preguntas, dejando clara su inexperiencia; y otros actúan como si estuviesen en un lugar de citas en el que poder ligar con cualquiera.
Todos estos sentimientos son totalmente comprensibles, pues le pasan a todos los que entran por primera vez (y hasta por segunda vez) en este tipo de establecimientos.
Si es tu primera vez en una sex shop, puede que tengas algunas ideas preconcebidas acerca de lo que te vas a encontrar dentro. Pero desecha todo prejuicio. Cada tienda es diferente y tiene diferentes cosas.
En las tiendas grandes, generalmente hay zonas para hombres y zonas para mujeres; mientras que en las tiendas especializadas más pequeñas, pueden tener más variedad de juguetes que atienden a tipos específicos de juegos u orientaciones sexuales.
Independientemente de cómo sean, antes de ir a una sex shop debes saber lo que debes, y lo que no debes hacer.
Ve acompañado de un amigo o de tu pareja
Hacer algo nuevo sólo, produce ansiedad. Pero ir acompañado de alguien en quien confías, puede transformar completamente la experiencia, y convertirla en algo memorable.
Para que os sintáis más cómodos, estableced una palabra segura en caso de que una persona quiera irse rápidamente. Una palabra arbitraria que cualquiera de los dos pueda decir si se siente abrumado en algún momento durante la visita.
Ten claro lo que quieres
Una de las experiencias más frustrantes en cualquier venta, es cuando al preguntar al cliente lo que quiere, dice que "no sabe lo que está buscando" o que "sólo estaba echando un vistazo".
Para evitar esta situación, debes hacer los deberes y echar un vistazo en tiendas online para saber lo que quieres, y qué preguntas tienes que hacerle al dependiente. ¿Alguna idea de donde mirar? Prueba en la tienda erótica Mundo Erótico.
Pero no te sientas presionado, no tienes que comprar nada. Puedes pasarte simplemente para echar un vistazo. Puede llevar tiempo que te sientas lo suficientemente cómodo como para permitirte explorar tus deseos en un espacio público.
Actua normal: No tengas miedo de hacer preguntas
Los dependientes de las sex shop son personas cualificadas y profesionales, que saben muy bien lo que venden. No debes tener miedo de preguntarles lo que funciona y lo que no.
Siéntate libre de compartir tu propia experiencia con ellos, pues eso puede ayudar a futuros clientes.
Nadie te está juzgando, así que no lo pienses
En toda las sex shop hay vendedores amables, abiertos y receptivos. Hablan sin ningún tapujo de toda práctica sexual, y no te juzgan. Todos los días ven a todo tipo de personas.
Trabajan en una sex shop porque son sexualmente positivos y quieren que las personas, incluyéndote a ti, tengan más placer en sus vidas. Si no fuesen de mente abierta, no estarían trabajando allí.
Y si te encuentras con alguien conocido dentro, piensa que él está allí por el mismo motivo que tu. No tienes nada de qué avergonzarte.
Ya sea que tengas pareja o estés soltero, no hay nada de malo en tener un poco de diversión y disfrutar de las maravillosas sensaciones que tu cuerpo puede ofrecerte.
Puedes solicitar las muestras de lubricante que quieras probar
No te cortes. Hay todo tipo de lubricantes. Con base de agua, orgánico, con base de aceite, el que se calienta, el que hace cosquillas, el que tiene un efecto frío, etc.
Con todas estas opciones, es normal que no sepas cual elegir,
No dudes en preguntar si hay muestras gratuitas o ver si tienen en el mostrador. Y si hay un producto que quieres ver fuera de la caja, probablemente hay un modelo disponible de probador. En caso de duda, sólo pregunta.
No seas curioso haciendo preguntas personales a los dependientes
Si te interesa la vida amorosa del vendedor y haces preguntas personales, puedes encontrarte con una charla íntima que no quieres oír. Cuando les haces una pregunta y los tratas como un ser humano, están obligados a responder en consecuencia.
Estáte seguro de la compra
Puedes cambiar de opinión sobre lo que comprar. Algunos juguetes son baratos, pero otros requieren una buena inversión. No te sientas forzado a comprar algo si sabes que nunca lo vas a usar.
También es una buena idea consultar las políticas de devolución de los artículos antes de comprarlos y conservar los recibos de las compras.
Lleva una bolsa o mochila para meter dentro la compra
Algunas tiendas sólo tienen bolsas de marcas relacionadas con los productos, y puede que acabes llevando una bolsa con un nombre que te incomode. No asumas que sus bolsas serán discretas. Una vez que lo pagues, mételo en tu bolsa y listo. Lo entenderán.
