La OMS realiza desde hace meses una campaña para erradicar el VHC (virus de la hepatitis c) y está tirando de las bases médicas para que todo el mundo que tenga hepatitis o haya tenido pase por los centros de salud o áreas especailizadas y se haga unos análisis para que pueda acceder al tratamiento que será genérico para los portadores de la enfermedad y así poder erradicarla.
Diversos estudios muestran que el diagnóstico precoz y el inicio del tratamiento antiviral es la mejor medida para reducir el impacto de la enfermedad en los pacientes infectados por VHC, incluso en términos de ahorro económico para la administración sanitaria porque evita el deterioro de la salud de los pacientes y, en consecuencia, los enormes gastos que se generan si hay que tratar las complicaciones, ya que la infección por VHC supone una de las principales causas de cirrosis, hepatocarcinoma y trasplante hepático.
La OMS ha marcado como objetivo global la eliminación de la hepatitis C para 2030
Para conseguirlo se ha de avanzar en el diagnóstico de los "casos ocultos" para poder ofrecer tratamiento a TODAS LAS PERSONAS DIAGNOSTICADAS, tanto actualmente como en los próximos años. Si no se consigue que los pacientes puedan acceder al tratamiento curativo, antes de que se encuentren en fases avanzadas de la enfermedad hepática, el impacto de tantos fármacos eficaces para eliminar el VHC del organismo de las personas enfermas no sería optimizado y nunca se llegará a revertir la situación de la Hepatitis.
A los domicilios de los portadores de esta enfermedad llegan en estos días cartas del SACYL con la premisa de mantener los precetos de la OMS y llevar a cabo esta campaña. Con un simple análisis de sangre los técnicos dilucidarán si el enfermo puede optar a este tratamiento para erradicar definitivamente la enfermedad de su cuerpo y no ser portador ni transmisor de la misma.