Los funcionarios de la Tesorería de la Seguridad Social tuvieron que abandonar el edificio esta mediodía por una falsa alarma de incendio.
Al parecer una de las trituradoras sufrió un problema mecánico que hizo que se produjera un fuerte olor a quemado, los funcionarios salieron rápidamente del edificio para evitar problemas.
Una vez revisado el edificio volvieron a sus puestos de trabajo.