Una opción estupenda para un postre o para un vino en el postre sobre todo en la cercana Semana Santa. Torrijas, garrapiñadas, rebojos y magadalenas son también básicas tras la comida en las postrimerías de la Semana de Pasión zamorana. La receta es conocida por todos los que en estos días agasajan en casa al visitante o a los que han podido retornar por estas fechas tan señaladas en el calendario zamorano.
Los ingredientes a escala para cuantos más seamos, más nos saldrán y más trabajaremos pero el resultaddo seguro que merece la pena.
Estos serán los siguientes:
1 litro de aceite de oliva virgen, no vale escatimar en este aspecto el resultado puede depender y cuanto mejor sea el aceite mejor sera el resultado, 6 huevos , 1 kg de azúcar, 2 kg y cuarto de harina ( si es tradicional zamorana también mejor que mejor), un bote de esencia de anís y si es menester levadura.
En un recipiente se mezclan el aceite, el azúcar y la harina con la levadura y los huevos se añaden despacio y con tiento y claro está como hacen todas las madres con mucho cariño. La esencia de anís también se añade al gusto.
De aquí si no se amasa con mezcladora/amasadora, a dejar en reposo, que siempre las cosas con calma en la cocina mejor quedan, en torno a media hora de descanso puede ser lo idóneo.
Esta masa que hemos realizado no es compacta y ahora es el momento de apretar la masa a mano y confeccionar las bolitas o bolas ( aquí la medida es la de la mano) y de ahí a la bandeja para que el horno continúe con el trabajo. No sin antes "pintar" o untar con huevo la superfice haciendo con un cuchillo la señal de la cruz en la bola para que esta se abra un poco y quede con esa característica forma.
Al horno ente 190ºC/ 200ºC echando el ojo a cada poco y en un cuarto de hora a veinticinco minutos en fución de lo grande que hayamos dejado la aceitada estará lista, para tras enfriarse degustar una de las dueñas de la repostería de la Semana Santa de Zamora "La Aceitada".
La opción de poder llevar al horno del obrador las aceitadas como se hacía antiguamente aún existe en algunos obradores, pero si tienen opción en casa también quedan perfectas.
Si no quiere pasar el tiempo y le invade la comodidad, en la Panadería Las Carabelas las hacen artesanalmente y el horno, le da un toque más que especial. Es más, en las Carabelas tienen de dos tamaños, la auténtica la de siempre y una versión mini que es la más demandada mal que les pese a los "mellizos".
Galería de imágenes de una tarde de "aceitadas"
Fotos: Fco Colmenero