El Zamora, plagado de bajas, quiso reencontrarse con las buenas sensaciones a nivel defensivo y con un planteamiento más conservador buscó no encajar gol después del resultado en el encuentro frente al Pontevedra. Tras un vistoso partido a pesar del 0-0, Deportivo Fabril y Zamora se repartieron los puntos de forma justa.
Las dos escuadras se encontraban cómodos en la recuperación en los primeros compases del encuentro, pero con mucha precaución a la hora de jugar con verticalidad, manteniéndose a la espera y midiéndose antes de entrar en el cuerpo a cuerpo.
Aunque el Zamora parecía tener mayor presencia, el filial deportivista no renunciaba a defender en los primeros minutos. Superado el cuarto de hora, los blanquiazules se desquitaban de la presión y comenzaban a hacerse con la posesión.
El Fabril tendría la primera gran ocasión del partido a los 17 minutos en las botas de Kevin. Iano cabalgaba por la banda izquierda y tras cruzar hasta tres cuartos del campo del Zamora entregaba al delantero deportivista, quien revolvía en la frontal y a la media vuelta buscaba la escuadra, aunque el esférico salía besando el travesaño.
El Zamora, con línea de cinco a la hora de defender, obliga al Deportivo Fabril a elaborar más las jugadas, con mucha dificultad cuando tocaba llegar a línea de fondo. El partido caminaba a la media hora y los de Coruña pisaban área rojiblanca pidiendo penalti por una posible mano, a priori clara, del defensor del Zamora, pero que el colegiado no apreció.
Se sobreponían los pupilos de Movilla y a trompicones conseguía su primera oportunidad de peligro. Morales ponía un centro desde la banda izquierda y tras una serie de intentonas, Mancebo conseguía sacar un disparo seco que sacaba el defensor en el área pequeña.
Rubén López lo intentaba desde lejos con un disparo a ras de suelo, aprovechando la humedad del césped, complicando las cosas a un Fermín Sobrón al que se le colaba el balón aunque, bien colocado, sacaba con el cuerpo a córner. Iba a tener la segunda ocasión consecutiva el jugador del Deportivo Fabril, quien se encontraba un balón en boca de gol tras una jugada rápida que pillaba desprevenido al Zamora. El cabezazo, que parecía más difícil fallarlo, acabó desviado por el lado izquierdo de la portería de Sobrón.
Tras un final de primera parte en el que el Zamora tuvo que sufrir, el colegiado indicaba el camino de vestuarios con el empate a cero.
La segunda mitad comenzaba con sobresalto para el Zamora y es que en una jugada fortuita un jugador del Fabril se caía encima de la rodilla de Parra, que volvía a la titularidad tras su lesión y, a pesar del dolor, todo acabó en un susto.
El duelo seguía la misma tónica que el final de la primera parte y el Fabril seguía llegando a portería de un Zamora que esperaba resguardado en defensa.
Intentaba el conjunto rojiblanco hacerse con el balón y enfriar al Fabril, aunque eran posesiones sin peligro y con pases horizontales defendidos con comodidad por los deportivistas. Buscando el error, la escuadra blanquiazul iba a aprovechar un mal pase de Carlos Ramos y en la segunda jugada Kevin se plantaba frente a Sobrón, quien se hacía grande para sacar el mano a mano.
Reaccionaba el Zamora a balón parado, con un balón desde la esquina que prolongaba Etxaburu con la espuela y el balón que se encontraba Castañeda acababa muy alejado de la portería local. La gasolina comenzaba a escasear en las filas deportivistas y los de Movilla comenzaba a merodear el área de Brais.
Los primeros cambios llegaban de forma obligada en el Fabril por la lesión de Pereira, teniendo que entrar Barbaa en su lugar. Por su parte, David Movilla movía ficha en el minuto 75, dando entrada a Baldrich en lugar de Morales. De esta forma, el Zamora pasaba a jugar con dos delanteros con Pito Camacho y el recién incorporado Sergi Baldrich.
Buscaba el contragolpe el Deportivo Fabril con mucha potencia en las piernas de Thymos, pero el repliegue del Zamora pudo contener la ofensiva blanquiazul. Lo seguía intentando el conjunto deportivista con centros laterales y Mati Castillo se quedaba a escasos centímetros de ver portería con un disparo al primer toque, pero el giro de cadera no fue suficiente para alcanzar el fondo de las mallas.
Los rojiblancos embotellaban al Fabril en el tiempo de descuento, aunque sin generar peligro en la portería de Brais. La última acción correspondió a un Zamora que no inquietó a Brais. Con el 0-0 el colegiado señaló el final del encuentro, un reparto de puntos justo que devuelve las sensaciones a nivel defensivo a los de Movilla.
