La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha alertado sobre una grave crisis en el sector del vino, agravada por el incumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria por parte de las bodegas. UPA denunció la falta de contratos previos entre productores y bodegas, lo que ha llevado a intervenciones de la Agencia de Información y Control Agroalimentario (AICA). Además, la organización ha señalado que la rentabilidad de los viticultores se encuentra en peligro, sumándose a los desafíos climáticos y económicos.
El descenso del consumo de vino, tanto en España como en el extranjero, es otro factor clave en la crisis. UPA destacó que, tras la pandemia, el consumo ha caído significativamente, afectando las ventas nacionales y de exportación. Además, las campañas contra el alcohol están afectando al sector al incluir el vino en la misma categoría que otros productos, lo que, según UPA, es injusto para un alimento con tanta importancia social y económica en el país.
Ante este panorama, UPA ha presentado un conjunto de medidas urgentes para salvar al sector vitivinícola. Entre las propuestas destacan la congelación de nuevas plantaciones hasta 2026, ayudas a viticultores que abandonen el sector de manera digna, y mayor flexibilidad ante las crisis del mercado. También pidieron reforzar la investigación en el sector y el apoyo a la producción ecológica, en aumento en España.
Por último, UPA ha pedido a las autoridades europeas que actúen, recordando que la crisis afecta a todo el continente. El Grupo de Alto Nivel sobre el futuro del sector del vino se reunirá el 11 de septiembre, donde se espera abordar las propuestas. Para la campaña de 2024, UPA prevé una producción de 38 millones de hectolitros, con existencias un 16,5 % menores que el año anterior.