UGT Servicios Públicos Castilla y León ha emitido un comunicado en el que denuncia la “utilización de la sanidad pública de la comunidad”, como ya ocurrió en la legislatura anterior con la reordenación del territorio llevada a cabo por Igea, por parte del presidente Fernández Mañueco y su gobierno de extrema derecha, para verter una ideología regresiva en los derechos sociales conseguidos, que atenta contra las mujeres y pone en riesgo y en duda el buen hacer y la profesionalidad del personal sanitario de la comunidad. En palabras de Miguel Holguín, secretario autonómico de sanidad del sindicato, “Mañueco ha levantado esta cortina de humo para tapar el trampantojo de sus listas de espera y la falta de iniciativas por parte de la Consejería para solucionar los problemas que van matando poco a poco nuestra sanidad pública”.
Desde el sindicato hacen hincapié en el “desconocimiento demostrado por los responsables autonómicos del mundo sanitario y del día a día de todos los niveles asistenciales” al poner en duda la atención integral que se está dando a la mujer embarazada en SACYL por parte de los profesionales y pretender que estos influyan sobre las decisiones que, razonada y personalmente, tomen las mujeres respecto a su situación. Además, “lo que debería preocupar al gobierno de Mañueco”, según indica Holguín, “es el hecho de que en esta comunidad solo sean 2 hospitales los que llevan a cabo Interrupciones Voluntarias del Embarazo(IVE), recordándole que “a pesar de ser un derecho reconocido por la ley, se está obligando a la mujer que libremente decide abortar a recurrir a la sanidad privada o al peregrinaje entre provincias y comunidades”.
Por otra parte, UGT también denuncia “el silencio atronador” de las Organizaciones Colegiales Médicas ante unas medidas que podrían abocar a los ginecólogos y ginecólogas de la comunidad a un embrollo jurídico, de producirse la modificación contraria a la ley de los protocolos asistenciales, hecho que, a día de hoy, no ha ocurrido por mucho que se empeñe declarativamente el vicepresidente. En este sentido, el secretario de sanidad del sindicato se pregunta “si la cercanía ideológica de Villarig a esta mentalidad retrógrada o bien sus negociaciones con el consejero Vázquez son la mordaza para que ningún Colegio de Médicos haya salido a defender a los profesionales”.
UGT Servicios Públicos Castilla y León ha concluido exigiendo que Mañueco abandone las veleidades con la sanidad de la comunidad, que deje trabajar a los profesionales y que el Consejero Vázquez actúe de una vez como Consejero de Sanidad y no deje que la ideología de sus compañeros de gobierno usurpe sus funciones, “debe elegir entre ser colaboracionista del machismo fascista o dirigir la consejería con criterios técnicos y clínicos que protejan a los sanitarios y que aseguren una sanidad de calidad; y si no quiere o puede, que se vaya”.
