Las familias monoparentales en Castilla y León, especialmente aquellas encabezadas por mujeres, enfrentan una situación de vulnerabilidad extrema. Según el 12º informe sobre "Monoparentalidad y empleo" de la Fundación Adecco, más de 84.400 mujeres en la región luchan diariamente contra la pobreza y la exclusión social, en un escenario que afecta tanto a su estabilidad económica como a su bienestar emocional.
El desempleo es un factor determinante en esta crisis silenciosa. El 70% de las mujeres que son el único sostén de sus hogares, y que no tienen empleo, se encuentra en situación de pobreza. Las cifras reflejan un contexto alarmante: nueve de cada diez no logran llegar a fin de mes, y la mayoría tiene dificultades para cubrir necesidades básicas como el alquiler (80%), la educación de sus hijos (75%) o incluso la ropa (67,5%).
Uno de los datos más preocupantes del informe señala que el 75% de estas mujeres enfrenta obstáculos para costear la educación de sus hijos. Esta realidad sugiere un futuro incierto para la próxima generación, que podría ver limitadas sus oportunidades de formación y, en consecuencia, su empleabilidad. “Si no abordamos estas dificultades estructurales, podríamos estar dejando atrás a toda una generación", advierte Begoña Bravo, directora de Inclusión de la Fundación Adecco. La advertencia es clara: las condiciones económicas de las madres están condicionando el futuro de sus hijos, profundizando las brechas sociales.
El informe también destaca el enorme impacto emocional que la situación genera en las mujeres. El 75% de ellas experimenta una caída significativa en su autoestima y su salud mental debido a la presión de mantener a sus familias sin apoyo. Además, el 71% manifiesta sentirse aislada, con redes de apoyo casi inexistentes.
Para agravar la situación, la búsqueda de empleo se convierte en un desafío casi insuperable. El 50% de las mujeres monoparentales lleva más de un año buscando trabajo, mientras que el 60% se plantea recurrir a la economía sumergida debido a la urgencia de generar ingresos. Las barreras laborales son múltiples: el 82,5% no encuentra un horario que se ajuste a sus necesidades familiares, el 65% percibe prejuicios sobre su capacidad y el 55% afirma que la "carga emocional" dificulta su concentración en la búsqueda de empleo.
Las 106.700 familias monoparentales de Castilla y León representan uno de los colectivos más golpeados por la crisis económica y social. La Fundación Adecco hace un llamado a las instituciones y a la sociedad para abordar las dificultades que enfrentan estas familias, con el fin de evitar que tanto madres como hijos queden atrapados en un ciclo de pobreza y exclusión.
