
Castilla y León ha recuperado el liderazgo en turismo rural con un total de 339.854 pernoctaciones durante el pasado mes de agosto. Supone seis puntos menos de lo registrado en el mismo mes de 2021 pero por encima de la época preCovid, en 2019 cuando se alcanzaron las 335.934 pernoctaciones. Además, la región recupera el primer puesto en la categoría de alojamientos rurales que le había arrebatado las Islas Baleares.
Los datos publicados por la Encuesta de Ocupación en Alojamientos Turísticos publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) revela que durante el pasado mes de agosto 100.169 viajeros pasaron por alojamiento rurales en Castilla y León, un 8,15% menos que en el mismo mes de 2021. De ellos el 91,07% eran residentes nacionales mientras que 8.937 eran turistas residentes en el extranjero.
La estancia media en los establecimientos rurales de Castilla y León a lo largo de agosto fue de 3,39 días situándose por debajo de la media nacional (3,80 días).
Datos nacionales
Las pernoctaciones en alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos, campings, alojamientos de turismo rural y albergues) superan los 25,6 millones en agosto, frente a los 22,2 millones del mismo mes de 2021, lo que supone un aumento del 15,1%. Las pernoctaciones de residentes bajan un 10,3%, mientras que las de no residentes se incrementan un 81,5%. La estancia media es de 5,0 pernoctaciones por viajero.
Durante los ocho primeros meses de 2022 las pernoctaciones aumentan un 68,7% respecto al mismo periodo del año anterior y se sitúan en los niveles pre-pandemia, en 2019. Tanto en el caso de los campings como en los establecimientos de turismo rural y en los albergues, las pernoctaciones acumuladas entre enero y agosto están por encima de los niveles de 2019.