El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha protagonizado este viernes 25 de abril un nuevo capítulo en la historia del Diálogo Social en la Comunidad, al firmar cinco acuerdos estratégicos con los principales agentes económicos y sociales: CCOO, UGT y CEOE. Un pacto que no solo refuerza el compromiso político con la concertación y el consenso, sino que además supondrá una inversión sin precedentes de más de 2.100 millones de euros entre 2025 y 2028.
En un acto celebrado en la sede de la Presidencia de la Junta, Mañueco ha comparecido junto a Vicente Andrés (CCOO), Óscar Lobo (UGT) y Santiago Aparicio (CEOE Castilla y León) para escenificar una alianza a largo plazo en favor del empleo, la educación y la igualdad. “El Diálogo Social no es una pose ni un eslogan. Es una herramienta real, viva y eficaz para transformar la vida de las personas”, afirmó el presidente regional, que ha defendido con vehemencia la utilidad de este modelo de colaboración institucional como seña de identidad de Castilla y León.
Los cinco acuerdos firmados —cuatro de ellos enmarcados en la IV Estrategia Integrada de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos Laborales e Igualdad y un quinto correspondiente al Plan Anual de Empleo 2025— constituyen, según subrayó Mañueco, “una hoja de ruta esencial para garantizar una sociedad más justa, inclusiva y competitiva”.
El acuerdo más relevante desde el punto de vista económico es el Acuerdo de Empleo de Castilla y León 2025-2028, con una dotación cercana a los 1.000 millones de euros. En él se recogen políticas activas destinadas a prevenir el desempleo, mejorar las oportunidades laborales y acompañar a los trabajadores en su capacitación, con el objetivo de facilitar su adaptación a las necesidades cambiantes del tejido productivo. Además, pone el foco en el autoempleo, la economía social, la orientación laboral y, especialmente, en los territorios más vulnerables.

También con una inversión de 1.000 millones de euros, el Plan General de Formación Profesional se convierte en uno de los grandes pilares del modelo educativo regional. Entre sus metas se encuentran alcanzar los 55.000 alumnos de FP en el curso 2028-2029, incrementar un 25 % la oferta de cursos de especialización, y mantener la inserción laboral media por encima del 85 %. Este plan apuesta por la modernización, la flexibilidad del sistema formativo y la colaboración público-privada, todo ello bajo principios de equidad, calidad e inclusión.
En materia de seguridad y salud en el trabajo, el VII Acuerdo para la Prevención de Riesgos Laborales prevé más de 48 millones de euros para promover una cultura preventiva que integre la seguridad laboral desde las pymes hasta el mundo rural. Se abordan además desafíos contemporáneos como la salud mental, los efectos del cambio climático, la digitalización o el envejecimiento de la población trabajadora.
Por otro lado, el Plan para la Igualdad de Género, Corresponsabilidad y Juventud en el Empleo, con un presupuesto de 54 millones de euros, busca consolidar la igualdad de oportunidades en el acceso y mantenimiento del empleo, especialmente entre mujeres del medio rural y jóvenes. Incluirá programas de sensibilización, ayudas a la contratación, incentivos a la promoción profesional y formación adaptada a las exigencias del mercado laboral actual.
A estos cuatro planes, que forman la columna vertebral de la Estrategia 2025-2028, se suma el Plan Anual de Empleo, Formación, Igualdad y Prevención de Riesgos Laborales para 2025, dotado con más de 294 millones de euros. Este plan, con carácter inmediato, llegará a más de 145.000 personas trabajadoras a través de programas de contratación, formación, intermediación y modernización del servicio público de empleo. Solo en políticas de contratación se invertirán 151 millones de euros, con previsión de beneficiar a más de 23.000 personas, mientras que en formación se destinarán cerca de 120 millones, alcanzando a más de 84.000 trabajadores ocupados y desempleados.

Los representantes sindicales y empresariales han coincidido en valorar muy positivamente los acuerdos alcanzados. Vicente Andrés, secretario general de CCOO Castilla y León, ha señalado que estos pactos “reflejan un compromiso real con la clase trabajadora y con los territorios más desfavorecidos”, mientras que Óscar Lobo (UGT) ha destacado el valor de la estabilidad y la concertación social como base del desarrollo económico sostenible. Por su parte, Santiago Aparicio, presidente de CEOE Castilla y León, ha subrayado la importancia de reforzar la competitividad empresarial “desde la cualificación, la seguridad laboral y la igualdad de oportunidades”.
Con estos cinco nuevos acuerdos, el Consejo del Diálogo Social de Castilla y León alcanza ya los 22 pactos firmados durante el mandato de Mañueco. Una cifra que, lejos de ser simbólica, consolida un modelo de entendimiento que, en tiempos de confrontación política generalizada, se presenta como una rara avis: un espacio donde el consenso, la responsabilidad compartida y la búsqueda del bien común aún encuentran su sitio.
“Hoy damos un paso más hacia una Castilla y León más fuerte, más cohesionada y con más oportunidades para todos”, concluyó Mañueco, en un mensaje cargado de optimismo y determinación.