Aragón, Castilla y León, Extremadura y Murcia encabeza la mayor sobrecarga de atención por parte del personal de Atención Primaria durante la segunda ola. Así lo ha puesto de manifiesto un estudio de la semFYC, la la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, que ha cuantifica la actividad asistencial de Atención Primaria por comunidades durante las sucesivas olas de COVID-19.
Los médicos de familia llegaron a atender una media de 55 pacientes (entre visitas presenciales, domiciliarias y telefónicas) a partir de finales de verano de 2020, coincidiendo con la segunda ola de Covid. la Atención Primaria tuvo así que hacer frente a la realización de las pruebas diagnósticas de covid al tiempo que se daba inicio a la campaña de vacunación de la gripe y los seguimientos de los contactos de positivos.
Cantabria, Castilla-la Mancha y la Comunidad Valenciana también evidencian esa "saturación" de pacientes entre los médicos de familia con un media de 50 visitas diarias mientras Galicia es la excepción y registra el menor número de atenciones diarias: 35.
Tal y como refleja el estudio de la semFYC, “el dato más impactante de estos resultados es el elevado número de pacientes con criterios clínicos de COVID-19, que eran diagnosticados por MF y que seguían en su domicilio. Pacientes que no precisaron hospitalización y que en la semana evaluada suponían una media de 37 pacientes por cada médico de familia (a nivel nacional). Se trata del amplio grupo de pacientes invisibles a las estadísticas y que recibían el soporte, acompañamiento y control en su domicilio, de forma telemática por parte de su equipo de Atención Primaria, evitando visitas innecesarias a urgencias hospitalarias”.
La semFYC considera que la Atención Primaria en España es "fuerte" y que sus profesionales son "versátiles" y profesionales, pero insuficientes, por lo que se plantea un futuro incierto. Al tiempo aseguran que la Atención Primaria "ha sido y sigue siendo invisible a los ojos de la Administración y la población”.
