Izquierda Unida Benavente reclama visibilidad institucional para el Orgullo LGTBI+

Izquierda Unida de Benavente se suma a la conmemoración del Día Internacional del Orgullo LGTBI+ y exige al equipo de gobierno local que vuelva a colocar la bandera arcoíris en el Ayuntamiento como símbolo de apoyo al colectivo. La formación recuerda que la igualdad y la dignidad aún deben defenderse desde lo público con medidas visibles y compromiso político.

Bandera Orgullo
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Con motivo del 28 de junio, Día Internacional del Orgullo LGTBI+, Izquierda Unida de Benavente ha mostrado su adhesión a la jornada conmemorativa y ha pedido sensibilidad al equipo de gobierno municipal. En concreto, la coalición reclama que se retome la colocación de la bandera arcoíris en la fachada del Ayuntamiento durante esa semana, como símbolo visible de apoyo institucional a las personas LGTBIQA+.

Desde IU recuerdan que “no basta con adherirse a la declaración institucional de la FEMP”, y subrayan la importancia de los gestos públicos y visibles en un momento en que las agresiones por motivos de orientación sexual o identidad de género están aumentando de forma alarmante.

La conmemoración del Orgullo recuerda cada año las revueltas de Stonewall en Nueva York, consideradas el origen de la lucha moderna por los derechos del colectivo. IU destaca que la diversidad afectiva y sexual todavía enfrenta obstáculos, a pesar de los avances legislativos. El colectivo LGTBIQA+ —que incluye lesbianas, gays, bisexuales, trans, intersexuales, no binarias, queer, asexuales, entre otras identidades— sufre aún discriminaciones múltiples en distintos ámbitos, agravadas por factores como el origen étnico, la edad o la discapacidad.

En España se han producido logros importantes como el matrimonio igualitario (2005), la Ley de Igualdad de Trato (2022) o la Ley Trans y LGTBI (2023). Sin embargo, según el informe “Estado del Odio: Estado LGTBI+ 2025” de la Federación Estatal LGTB, el 16,25 % de las personas del colectivo ha sufrido agresiones físicas o verbales en el último año, un incremento de más de 9 puntos respecto a 2024. La discriminación alcanza al 25,25 % de las personas encuestadas, lo que se traduce en más de 1,2 millones de afectados.

Este repunte de la violencia no es un fenómeno aislado. Las estadísticas del Ministerio del Interior y datos europeos también reflejan un aumento de los delitos de odio por orientación sexual e identidad de género. Por ello, Izquierda Unida hace un llamamiento a todas las instituciones democráticas a renovar esfuerzos contra la LGTBIfobia y comprometerse con la igualdad real desde las políticas públicas.

En este sentido, la formación insiste en la necesidad urgente de que Castilla y León cuente con una ley autonómica que garantice los derechos del colectivo LGTBIQA+, ya que actualmente es la única comunidad que carece de una normativa propia. Pese a que el pasado 11 de junio las Cortes de Castilla y León dieron luz verde a la proposición de ley presentada por el Grupo Socialista con el respaldo de toda la oposición —excepto Vox—, el Partido Popular optó por la abstención, permitiendo así su tramitación pero sin compromiso explícito.

Izquierda Unida advierte de que la igualdad no puede depender de los vaivenes políticos ni de gestos simbólicos aislados, y que aún persisten prejuicios que se manifiestan incluso en entornos educativos a través del acoso escolar homofóbico o lesbofóbico. Por ello, la formación defiende que la educación inclusiva es la herramienta fundamental para combatir la discriminación y construir una sociedad que reconozca y proteja la diversidad desde edades tempranas.

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