Izquierda Unida ha denunciado la recurrente crisis de cobertura médica durante el verano y el menoscabo de los servicios sanitarios en Castilla y León. A pesar del plan de contingencia de la Consejería de Sanidad, que costará 11,5 millones de euros para Atención Primaria y 17,6 millones para Atención Hospitalaria, este verano se cerrarán 459 camas en los hospitales de la comunidad. Además, se prevé la firma de 1.922 contratos para enfermería, con 1.467 contratos destinados a hospitales y 455 a Atención Primaria. En Zamora, se asignarán 97 contratos de enfermería en hospitales y 45 en Atención Primaria, sin ampliar la plantilla de médicos.
La falta de cobertura médica durante el verano es un problema recurrente en España, agravado este año por la pandemia y el retraso en la disponibilidad de los médicos internos residentes (MIR). Aproximadamente 2.500 MIR de último año están siendo utilizados para cubrir la falta de médicos en atención primaria durante el verano.
Izquierda Unida critica a la Junta de Castilla y León por no asumir su responsabilidad, argumentando que no se realiza una adecuada ponderación de las necesidades hospitalarias en verano, cuando la afluencia de turistas es mayor y algunos pueblos duplican su población. Este incremento de la demanda asistencial se traduce en más derivaciones a hospitales privados y un aumento de los seguros privados debido a la falta de atención y el incremento de las listas de espera.
En las zonas rurales, la población flotante aumenta considerablemente en verano, llegando a triplicar el número de habitantes en muchos pueblos. Sin embargo, es común que se recorten servicios para dar vacaciones, por falta de personal y de previsión de las gerencias y la Consejería. Izquierda Unida considera que la Junta de Castilla y León no busca más opciones que cerrar camas y servicios para dar vacaciones al personal, debido a la falta de plantilla suficiente. Esta situación se debe, según IU, a la falta de interés en solucionar el problema de las jubilaciones en el SACYL, que ha reducido el número de profesionales en los últimos años, y en atraer y retener profesionales.
IU propone reforzar adecuadamente las zonas de difícil cobertura, haciendo más atractivas las plazas de medicina familiar, aumentando la tasa de reposición y mejorando las condiciones laborales de los profesionales de la sanidad pública. Además, consideran incomprensible el cierre de camas en los hospitales de la Comunidad durante el verano, ya que la carga de trabajo no disminuye en este periodo y solo incrementa las listas de espera. Piden al ejecutivo autonómico que explique si el cierre de camas constituye un mecanismo de ahorro económico y que cuantifique ese ahorro, además de cuestionar si esta situación aumentará las derivaciones de pacientes a la sanidad privada.
Finalmente, advierten que en Zamora no disminuye la presión asistencial en verano, debido a la llegada de población de otras comunidades por las vacaciones. Izquierda Unida pide a la Junta mayor previsión, que no se paralicen pruebas e intervenciones, y que se busquen soluciones implicando a los agentes sociales, ya que esto solo supone un aumento de las listas de espera y un trasvase de pacientes de la sanidad pública a la privada.