Este domingo 29 de diciembre, la diócesis de Zamora dará inicio al Jubileo de la Esperanza, una celebración enmarcada dentro del Jubileo Universal convocado por el Papa Francisco para 2025. El acto principal será una peregrinación de fieles desde diversos templos del casco histórico de la ciudad hasta la catedral, donde se celebrará una eucaristía presidida por el obispo diocesano, Fernando Valera.
Las peregrinaciones, organizadas por los siete arciprestazgos de la diócesis, comenzarán a las 17.00 horas y se realizarán de forma escalonada. Cada grupo partirá desde un templo designado, portando una imagen religiosa representativa de su territorio. Por ejemplo, los fieles del arciprestazgo de Aliste-Alba llevarán la imagen de San Roque desde el templo del Carmen de San Isidoro, mientras que el arciprestazgo de Benavente-Tierra de Campos partirá desde la iglesia del convento de Las Marinas con la imagen de San Vicente de Paúl.
Este acto marca el inicio local del Jubileo Universal, que se desarrollará durante todo el próximo año bajo el lema “Peregrinos de la Esperanza”. En Roma, el Papa Francisco abrirá la Puerta Santa en la Nochebuena de este año, dando inicio formal a este periodo jubilar que se celebra cada 25 años.
El vicario de Evangelización de la diócesis, Francisco Ortega Vicente, ha destacado la importancia de esta celebración como un momento de reflexión y renovación espiritual. “Es un tiempo de gracia que invita a detenerse y renovar la confianza en el Señor, especialmente en un mundo necesitado de esperanza”, señaló.
La diócesis ha designado varios lugares como espacios jubilares, donde los fieles podrán obtener la indulgencia plenaria al participar en actos de fe y realizar obras de misericordia. Entre estos puntos destacan la Catedral de Zamora, que custodia las reliquias de San Atilano, patrón diocesano, y la Casa de Acogida Betania, dedicada a la atención de personas en situación de vulnerabilidad. También se incluyen el Colegio San Vicente de Paúl de Benavente, la Residencia San Agustín de Toro y el pueblo de Sogo, como referencia a las comunidades rurales.
Además, el obispo Fernando Valera ha anunciado la creación de una capilla de adoración perpetua en la ciudad de Zamora, que será un espacio de oración continua durante todo el Año Jubilar. Por otro lado, Cáritas pondrá en marcha un centro para la prevención de la salud mental y el suicidio juvenil, como parte de las iniciativas sociales asociadas a este Jubileo.