En medio de esta sexta ola de Covid que ha provocado un tsunami de cancelaciones de eventos para prevenir los ocntagios, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Bermillo acogía con todas las medidas sanitarias actualmente vigentes un concierto que ha llenado de calor los corazones de las decenas de personas que ayer se acercaron hasta la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.
La música de alumnos de la Asociación Etnográfica Bajo Duero puso el broche a una iglesia engalanada hasta el último detalle para celebrar estas fiestas, con un belén en el interior del pórtico realizado por la vecina del municipio, la artista Tere Araujo y que sigue unas líneas modernistas el estilo de los belenes expuestos por la zona. Con sus líneas minimalistas, rompe con el aire más tradicional del belén levantado junto al altar.
La asociación ha trasladado toda su ilusión en una cita de lo más esperada en los que el tambor y la flauta se mezclaban a la perfección con las voces de los integrantes de la asociación, muchos de ellos pandereta en mano y moviéndose con brío al son de unos villancicos que no han podido con la amenaza de la Covid y que han llenado de paz el templo bermillense.
