Los vecinos de la comarca de Sayago se han manifestado por centésimo cuadragésimo tercera vez (143) para reclamar una sanidad pública digna en la provincia. Esta protesta se ha intensificado tras la reciente noticia de que 13 médicos, que obtuvieron plaza en Zamora por oposición, se trasladarán a Valladolid en comisión de servicio, una medida que empeora aún más la ya complicada situación sanitaria de la comarca, especialmente en los meses de verano.
De un total de 38 plazas de médico de área en Zamora, 13 han sido autorizadas para trasladarse a Valladolid, una ciudad que no presenta carencias significativas de personal médico. Esta decisión, tomada por la Gerencia de Salud de Área, ha sido duramente criticada por los manifestantes, quienes argumentan que tal autorización debería posponerse hasta después del verano o debería ofrecerse a los médicos plazas de equipo en lugar de permitir su traslado inmediato.
Los vecinos de Sayago han reiterado sus exigencias para mejorar el sistema sanitario local, con peticiones claras y específicas:
Insisten en que los médicos deben tener consultas periódicas en todos los pueblos, independientemente del número de cartillas. Actualmente, las localidades más pequeñas, que antes contaban con consultas semanales, ahora solo tienen consultas mensuales, y en algunos casos, como Pasariegos, ni siquiera eso.
Exigen que los horarios de consulta sean conocidos por todos los vecinos y estén expuestos en la puerta de los consultorios, para evitar descontrol e incertidumbre.
Proponen que se elimine la necesidad de cita previa si se establecen días y horarios fijos para cada pueblo, argumentando que la atención presencial es posible sin riesgo de saturación del sistema, tal como ha respaldado el Procurador del Común de Castilla y León.
Los manifestantes subrayan que la sanidad pública es un elemento crucial de cohesión social que garantiza el acceso universal a la salud, independientemente del poder adquisitivo y del lugar de residencia. La mala gestión sanitaria, según ellos, agrava las desigualdades y disminuye la calidad de vida en la sociedad.
La despoblación, un problema creciente en la provincia, se combate manteniendo los servicios públicos, ya que la falta de estos servicios lleva a más despoblación y al consiguiente desastre humano, económico y medioambiental. Los manifestantes también destacan la necesidad de reconocer y respetar al personal sanitario, asegurando que las plantillas estén adecuadamente dotadas y organizadas.