En un acto sin precedentes de unión y preocupación por el bienestar de sus comunidades, los residentes y contribuyentes del Ayuntamiento de Vega de Tera, junto con otras localidades afectadas por el proyecto, presentaron hoy una petición acompañada de más de mil firmas que expresan su rechazo rotundo al proyecto de instalación de una planta de biogás en Junquera de Tera. Esta iniciativa, promovida por la empresa Capwatt y respaldada por el gobierno municipal de Vega de Tera, ha generado una significativa preocupación entre la comunidad local.
Las 1.078 firmas, recopiladas puerta a puerta y durante diversas manifestaciones, representan el rechazo unánime de los habitantes de los cuatro pueblos que componen el ayuntamiento, sumando un total de 360 habitantes, así como de vecinos de localidades vecinas afectadas por el plan. Los firmantes han expresado su oposición al proyecto debido a los posibles impactos negativos en la salud pública, el medio ambiente y la economía local.
Los residentes han mostrado su preocupación, especialmente después del anuncio de una convocatoria extraordinaria para el próximo pleno municipal, que finalmente fue cancelado debido a la falta de documentación por parte del Ayuntamiento.
El cambio en la parcela, que supone el primer paso para alquilar el terreno a Capwatt, ha generado malestar entre los vecinos, quienes temen las consecuencias de la instalación de la planta de biogás en la zona. Se señala que este proyecto plantea serias preocupaciones en cuanto a la gestión de residuos, los riesgos de contaminación y el impacto en el ecosistema local, además de su cercanía a importantes zonas naturales protegidas y rutas turísticas.
Los firmantes hacen un llamamiento a las autoridades provinciales para que tomen en consideración sus preocupaciones y se opongan al proyecto de planta de biogás en Junquera de Tera. Instan a buscar alternativas más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente, en línea con los principios de desarrollo sostenible y la protección del entorno rural.
Este acto de presentación de firmas refleja el compromiso de los residentes locales con la preservación de su patrimonio natural y cultural, así como su determinación para proteger la calidad de vida en sus pueblos. La comunidad espera que sus voces sean escuchadas y que se tomen medidas adecuadas para evitar los posibles impactos negativos de este proyecto en sus comunidades.
