En Castronuevo de los Arcos, la primavera se teje con hilos de colores y se plasma en murales de crochet. Una iniciativa que fusiona el arte y la tradición, llenando las calles con la frescura y la alegría de la nueva estación. 'El arte de tejer' comprende veintiún murales elaborados minuciosamente por una veintena de mujeres que dedican meses de trabajo para crear estas obras primaverales.
Cada mural, cuidadosamente tejido sobre fondos de tela de arpillera, refleja la esencia y los colores característicos de la temporada. Estas labores, realizadas con tesón, alegría y cariño, adornan la carretera de Villalpando en el tramo de Castronuevo de los Arcos, con un mural principal de aproximadamente veinte metros cuadrados ubicado en la pared exterior del local de usos múltiples del pueblo. Es una exhibición que no solo embellece el entorno, sino que también representa el esfuerzo y la creatividad de sus vecinas.

Con su destreza y habilidades, han hecho arte con las manos. Como antaño, las labores junto a la camilla han regresado a este municipio zamorano que pretende mantener una tradición. Una forma más de poner de manifiesto la extraordinaria habilidad de estas mujeres que se reúnen para avanzar en sus creaciones a dos agujas y con las que visten su pueblo.
Así, siguen las tradiciones. De tejer con el único acompañamiento de la radio o a la puerta de las casas en las tardes de verano. Una costumbre para que no se pierda. Una apuesta también por parte del ayuntamiento para fomentar la convivencia y la tradición, especialmente durante los meses de invierno. Junto con actividades como la gimnasia, la peluquería, los bailes tradicionales e incluso clases de pandereta organizadas por las Águedas, estas actividades están fortaleciendo el tejido social del pueblo.
