En un esfuerzo por capturar la esencia única de cada comarca y pueblo de la provincia, la empresa familiar Santiago Textil se embarca en un nuevo proyecto de personalización que busca poner en valor cada uno de los núcleos de población que comprenden el mapa zamorano. Así es la línea "Mi pueblo".
Con más de 74 años de historia, esta empresa regentada desde hace tres generaciones por la familia Genicio a lo largo de tres generaciones, sigue apostando por poner en valor el patrimonio cultural y la etnografía propia de un territorio que han logrado exportar hasta Marruecos o Ucrania algunas de las celebraciones locales más destacadas, desde la Semana Santa a las mascaradas y la indumentaria tradicional, sin olvidar festividades como San Pedro o el Toro Enmaromado.
Diseños propios que se retroalimentan a partir de las peticiones de sus clientes, encargados de aportar imágenes sobre los elementos más característicos de la zona que demandan y que les convierte en embajadores de un territorio que ahora podrá lucirse del torso a los pies. Una iniciativa tan propia como desafiante teniendo en cuenta que ese enfrentan al posible encargo de representar 12 comarcas y 248 municipios.
La línea de productos incluirá camisetas, sudaderas y calcetines, cada uno diseñado para reflejar elementos emblemáticos como el queso, el vino, la arquitectura local y otros aspectos culturales significativos. "Estamos cogiendo los elementos más representativos, como el queso, el vino, el ajo, entre cinco y seis elementos de cada comarca para llevarlos a imagen".
Una apuesta que ya ha cristalizado en forma de los primeros diseños que ya pueden adquirirse sobre los municipios de Pinilla de Toro, Vezdemarbán, Toro, Manganeses de la Lampreana, Santa Eulalia de Tábara y Tábara.
Cada comarca y pueblo será identificado por un color específico que refleje su identidad única. Así, Sanabria se asociará con el azul marino, La Carballeda con el azul índigo, y Tierra de Campos con tonos marrones terrosos. Un enfoque que no solo distingue visualmente cada producto, sino que también fortalece el sentido de identidad local entre los residentes.
Una iniciativa que no solo busca impulsar la economía local a través del comercio de productos personalizados, sino también fomentar el orgullo cívico y la conexión emocional con cada rincón de la provincia.
