El Zamora Club de fútbol se desplazaba hasta Pontevedra para disputar un partido que en primera instancia fue tranquilo con mucho control de los de Movilla e incluso con la iniciativa fruto de la cual llegó el gol de penalti que transformó Escudero tras el rechace en semi fallo del cancerbero gallego Mario.
El trío Ramos, Coque, Escudero hacía de las suyas en la banda izquierda y eran los zamoranos los que marcaban el tempo del partido en el campo del Pontevedra, el Pasarón. Los gallegos no eran capaces de traspasar las líneas o al menos así ocurría hasta el minuto 18 cuando llegó por primera vez a la meta de los rojiblancos que tenían planteado un partido de control y que jugaron con mucha cabeza y sobre todo sorprendiendo al rival con un juego vistoso y aunque calmado en los primeros minutos, siempre fue de control.
El partido estaba siendo para el equipo que más cómodo jugó, el ritmo lo marcó el Zamora, los espacios se gestionaron mejor y los zamoranos daban sopa con ondas a un Pontevedra que no encontraba el sitio en su propio terreno de juego. El sol lucía en el Pasarón para los zamoranos y las oportunidades de su juego llevaban mucho más largos los balones que sumían a los gallegos en su propio espacio. El Zamora ganaba en finalización y también en peligro, el gol que llegó en el minuto 35:40 de juego tras la transformación del penalti que llevó a cabo Escudero dio alas a los de Movilla para mantener el resultado hasta el medio tiempo. El colegiado añadió un minuto en la primera parte de juego.
El Zamora que llegó en tres ocasiones en la primera parte a la zona de meta gallega aprovechó una de ellas para marcar el gol que le daba la tranquilidad y al Pontevedra los nervios, ya que el equipo gallego necesitaba una vistoria si quería estar entre los tres primeros para ir asentando sitio y no hundirse en la tabla.
Ya en la segunda mitad los gallegos intentaban imponer su juego y la rapidez en el juego y la aceleración era controlada por los zamoranos que no se contagiaban de los nervios de los gallegos que mostraban su prisa en todas las líneas.
El Zamora no ocasionaba peligro pero si daban un perfecto tempo a las oportunidades, soltando de vez en cuando algún disparo que asustaba a los gallegos, aunque sin marca final.
Las oportunidades se sucedieron pero sin finalización definitiva. El Zamora se llevó los tres puntos en el Pasarón.
El 0-1 valió y el Zamora se llevó el partido porque jugó y planteó mejor partido.
