La inmaculada trayectoria rojiblanca se ha visto cortada por el empate en Burgos y la derrota ante el GCE VIllaralbo por lo que, pese a seguir en lo más alto de la tabla y con una renta importante todavía, el encuentro ante el Santa Marta cobra especial importancia para cerrar este pequeño periblo sin victorias y seguir mandando con puño de hierro.
Sin Juanan, Medu y Carlos Valverde, Balta tiene pocas opciones para componer su once en una plantilla corta que, de aquí a final de temporada, es muy posible que se refuerce para poder luchar por el ascenso con mayores posibilidades. La defensa, con dos laterales fuera de la convocatoria, tendrá que echar mano de un extremo como Coque para acompañar, previsiblemente, a Josema, Andoni y Edu Ruiz, que vuelve tras cumplir sanción.
Tampoco se esperan grandes sorpresas en la medular en la que Nacho Huertas había perdido peso en las últimas semanas para sorpresa de la grada, y que en Santa Marta tiene la opción de reivindicarse junto a Vilchez y acompañado en las alas por Manu Moreira y un Aarón que bajó hasta el lateral en el último encuentro.
Enfrente los zamoranos tendrán a un Santa Marta que hace del buen juego su bandera y que, pese a caer duramente derrotado en Zamora, puso en problemas durante algunos minutos a los de Balta. El cesped artifical y su público serán uno de los factores que los charros, que buscan dejar de ser un equipo ascensor y asentarse en Tercera División, logrando unos puntos que le permitirian un pequeño colchón.
En el seno del Zamora existe tranquilidad tras los dos últimos encuentros, pero una victoria serviría además para que el soniquete de dos semanas sin sumar acabara por completo y siguieran las buenas noticias en un equipo que quema semanas para alzanzar, primero el play-off, y después el primer puesto.
