Tras un partido marcado por la frustración de los penaltis, el central del Zamora CF, Carlos Gutiérrez, mostró una mezcla de decepción y orgullo por el rendimiento colectivo. Aunque el resultado fue adverso, Gutiérrez destacó los aspectos positivos de un encuentro en el que, a su juicio, el equipo mereció mucho más: "Se ha visto un equipo con mucho potencial. Estaremos mejor o peor, pero tenemos todo para hacer una buena temporada".
El defensa confesó sentirse dolido, especialmente por la importancia personal que este partido tenía para él. "He jugado muchas veces contra ellos y me voy triste, pero contento con mi rendimiento. La confianza viene de uno mismo, no de jugar más o menos", comentó con sinceridad.
Gutiérrez habló también sobre la complicidad en la zaga, donde alterna como pareja con Bolo y José Carlos: "Nos entendemos muy bien. No importa el perfil en el que juegue, estoy para ayudar en lo que haga falta, incluso de portero si es necesario". La solidez defensiva del equipo fue evidente, especialmente teniendo en cuenta el desgaste físico tras jugar 120 minutos.
Pese a la carga física y anímica, el central se mostró optimista de cara al próximo compromiso: "No creo que este partido pese moralmente. Sabemos que lo importante es el sábado, ahí es donde nos jugamos el pan". La plantilla se prepara para pasar página rápidamente y enfocarse en el siguiente reto.
Al hacer balance de la evolución del equipo desde el inicio de la temporada, Gutiérrez señaló la importancia de la adaptación: "Nos costó arrancar, y a mí también. No llegué desde el principio y uno ya no tiene 23 años. Ahora me encuentro muy bien, y eso se ve en el campo". Reconoció haber cometido errores al principio, pero aseguró que esos tropiezos le han servido para fortalecerse.