La Unión Regional de Cooperativas Agroalimentarias de Castilla y León (URCACYL) y las Cajas Rurales de la comunidad han suscrito este lunes 23 de junio un nuevo acuerdo marco de colaboración con el objetivo de fortalecer su compromiso con el cooperativismo agrario, ganadero y financiero de la región. El acto, celebrado en la sede de Caja Rural de Zamora, ha servido para escenificar la continuidad de una alianza que lleva más de quince años sustentando el desarrollo del mundo rural en Castilla y León.
Durante el encuentro, los representantes de ambas entidades han subrayado la importancia de seguir trabajando juntos “desde el cooperativismo y para el cooperativismo”, tal y como expresó Nicanor Santos Rafael, presidente de Caja Rural de Zamora. “No es casualidad que hoy estemos aquí: somos parte de una misma visión, una forma distinta de hacer economía, donde lo prioritario no es el capital, sino las personas, los proyectos y el territorio”, afirmó.
Por su parte, Fernando Antúnez García, presidente de URCACYL, destacó el papel vertebrador del cooperativismo en la región. “Castilla y León no puede entenderse sin sus agricultores, sus ganaderos y sus cooperativas. Generan riqueza, empleo y arraigo. Y esta alianza con las cajas rurales es clave para seguir consolidando ese modelo”, señaló.
El acuerdo contempla el desarrollo conjunto de iniciativas como actividades formativas para jóvenes cooperativistas, la organización de jornadas divulgativas, la publicación de un catálogo de productos cooperativos y el respaldo a eventos como los Premios Manojo, galardones que reconocen la calidad de los vinos elaborados por bodegas cooperativas de la región.
Jerónimo Lozano, director de URCACYL, detalló que la colaboración también incluirá acciones de comunicación y visibilidad para reforzar la presencia del cooperativismo en la sociedad. “Cada proyecto, cada evento que promovamos desde URCACYL contará con la implicación directa de las cajas rurales, que han sido aliadas naturales desde nuestros orígenes”, señaló.
Además, se remarcó un hecho diferencial: las Cajas Rurales de Castilla y León son las únicas entidades financieras con sede fiscal en la comunidad autónoma, lo que garantiza que su actividad repercute íntegramente en el desarrollo local. “Eso nos convierte en un motor real de economía social. Todo lo que generamos se queda aquí, en nuestros pueblos y comarcas”, apuntó Cipriano García, director general de Caja Rural de Zamora.
En el tramo final del acto también se abordó la coyuntura económica del sector agroalimentario. Las previsiones para la campaña agrícola apuntan a una cosecha de notable calidad, aunque los representantes de URCACYL reconocieron que la evolución de los precios dependerá en gran medida de factores externos como los conflictos internacionales y las tensiones comerciales globales.
Asimismo, se recordó el papel que jugó URCACYL en momentos complicados del sector financiero, como el respaldo institucional prestado durante la reestructuración de la antigua Caja Rural del Duero, reforzando así la confianza mutua entre el sector cooperativo y las entidades rurales.
“Esta no es solo una firma, es una reafirmación de valores compartidos, de un modelo de desarrollo enraizado en la tierra y en las personas”, concluyeron los intervinientes.
