viernes. 29.03.2024
Foto de archivo supermercados
Foto de archivo supermercados

El IPC cierra un año de escalada de precios, la energía una de las causantes ha hecho variar el índice en casi un punto, además de los alimentos que vuelven a tener una pescadilla que muerde la cola a un sistema que se revuelve para intentar regenerar sus problemas de producción energética. 

Por este índice en el que Zamora está a la cabeza se puede entender como evoluciona todo en nuestro país y cuando el IPC en provincias como la nuestra llega a este extremo es que la población empobrece de nuevo. Una pobreza que obliga a cerrar negocios y que ha vuelto a dejar desolada una provincia que no levanta cabeza, solo los políticos de la provincia son los que han podido ver crecer algo, sus sueldos.

Zamora se fue de la media hasta el 7% una consecuencia lógica de una ciudad de provincias olvidada y dejada de la mano de políticos y mandatarios que solo se alarman cuando hay elecciones, entre tanto dejan que la sangría demográfica, y el empleo además de las oportunidades emigren y la consecuencia es esta escalada que en este último mes ha llegado a incrementarse en un 1,1%

No hay que ser un monstruo en economía de mercado sino simplemente acercarse a un supermercado o pagar la factura de la luz o de la gasolina para ver un incremento que nada tiene que ver con el poder adquisitivo de una provincia que sigue rota energéticamente a cuenta de la falta de cánones como debería tener por ser una de las mayores exportadoras de este bien que sume bajo el agua a localidades y que deja en la sequía a pantanos por aquello del "todo por la pasta".

Todo por las nubes, IPC en niveles de 1992, Zamora en el 7% todo un récord, otra lástima