Las residencias de la provincia continúan estabilizando los marcadores de la pandemia sin notificar fallecidos. Gracias a ello, las cifras no aumentan y los centros residenciales siguen sumando 314 muertes desde el inicio de la pandemia.
Actualmente hay una persona con sintomatología positiva, una cifra que se ve reducida de los trece usuarios que notificó la Junta de Castilla y León, el pasado seis de junio.
Además, continúa a cero el número de internos aislados como medida preventiva.