El último pleno municipal del año en el Ayuntamiento de Zamora estuvo claramente protagonizado por las reivindicaciones de igualdad laboral de los bomberos de la capital, que asistieron a la sesión portando carteles con el lema “Igualdad” y mostrando su malestar por el rumbo de las negociaciones con el equipo de Gobierno.
La sesión vivió momentos de tensión, con comentarios y murmullos por parte del colectivo desde el público, lo que llevó al alcalde, Francisco Guarido, a intervenir para pedir respeto y llamar al orden. El aviso fue aceptado de inmediato por los bomberos, lo que permitió continuar el desarrollo de la sesión plenaria, aunque el clima de desacuerdo se mantuvo durante buena parte del debate.
Los murmullos se intensificaron cuando tomó la palabra la concejala de Recursos Humanos, Laura Rivera, responsable directa de la negociación con el colectivo. Su intervención evidenció la distancia existente entre ambas partes, especialmente en cuestiones clave como la organización del servicio, la jornada laboral y las condiciones retributivas.
La tensión en el salón de Plenos contrastó con el mensaje trasladado 24 horas antes por Rivera en rueda de prensa, en la que aseguró que existen “más acuerdos que desacuerdos” con los bomberos y defendió que el Ayuntamiento mantiene abierta la vía del diálogo. La concejala se mostró dispuesta a seguir negociando y a estudiar una ampliación de la plantilla, aunque siempre —subrayó— dentro de los límites legales y presupuestarios.
Sin embargo, la versión del colectivo difiere notablemente. A la salida del pleno, los representantes sindicales, entre ellos Miguel Ángel Jurado, denunciaron que no existe una negociación real y reclamaron la creación de una mesa sectorial específica, con actas oficiales que recojan lo tratado en cada encuentro. Los bomberos acusan a la concejala de Recursos Humanos de mantener un discurso cambiante y de trasladar a la opinión pública una imagen de acuerdo que, a su juicio, no se corresponde con la realidad.
Según explicaron, el conflicto sigue “enquistado” y las respuestas ofrecidas en el pleno a preguntas de la oposición fueron “breves y superficiales”, sin entrar en el fondo de las reivindicaciones ni aclarar aspectos como la aplicación de sentencias judiciales recientes que afectan al colectivo.
Las demandas de igualdad cobraron especial relevancia en un pleno en el que el Ayuntamiento aprobó de urgencia un acuerdo con la Policía Municipal, tras cerca de un año de negociaciones. Un hecho que refuerza su exigencia de equiparar sus derechos laborales a los del cuerpo policial, tanto en estructura de negociación como en reconocimiento profesional.
El mensaje quedó claro por parte del colectivo: las movilizaciones continuarán si no se formaliza un marco de negociación estable, transparente y con compromisos verificables. La oposición expresó su preocupación por la situación de la negociación con los bomberos del Ayuntamiento y tanto el PP como Zamora Sí pidieron a la concejala de Recursos Humanos seguir negociando
Así, Prada solicitó al equipo de Gobierno se siente a negociar de "manera seria y sin líneas rojas", para alcanzar un acuerdo lo antes posible, de la misma manera que se ha hecho con la Policía municipal. "Solo así podremos lograr paz laboral en el Ayuntamiento", aseguró.