El colegio Santísima Trinidad (Amor de Dios) de Pinilla continúa presentando los habituales problemas en los momentos álgidos de la entrada y salida de alumnos. Los progenitores llevan meses denunciando la necesidad de regular el tráfico con unidades policiales que permanezcan atentos a que no se produzca ningún riesgo para los viandantes, y especialmente los menores que tienen un paso de peatones en la misma puerta de acceso al recinto educativo.
El colegio, situado en la calle Entrepuentes, se ubica en un punto de tráfico complicado y que siempre ha traído de cabeza a los padres que elevan el tono ante la que tildan de "inacción policial". Y es que tras solicitar en reiteradas ocasiones la presencia de patrullas que regulen el tráfico en la zona tanto a la hora de entrada de los menores al centro a primera hora de la mañana como de salida a primera hora de la tarde.
Precisamente la ubicación del paso de peatones a la puerta del colegio supone un peligro en una zona que, pese a que posee badenes para tratar de asegurar una velocidad reducida y vallas para mayor seguridad de los viandantes.
