En la víspera el lleno fue total, de los que marcan una noche de fiesta, peñas, familas al completo y bares hasta los topes. La Plaza Mayor tuvo ese lleno que gusta disfrutar y que marca también la llegada del día grande de la ciudad.
La cerámica hasta atrás también y como no las casetas y los bares de los alrededores, mientras los más rezagados compraban los ajos que este año han sido menos los expositores pero con producto de gran calidad.
Zamora se ha vuelto a vestir de fiesta buscando un poco de fresco en el paseo y en la verbena de la Plaza que ha sido el aliciente del asueto y por supuesto la festividad de este 2023 que servirá también de puente para muchos, de salida de vacaciones y de retorno de otros tantos.
La provincia se transforma en el verano y prueba de ello son las fiestas de San Pedro que este año vuelven a ser de predominio callejero. La Bien Cercada se acostará tarde esperando el fresco que a partir de la media noche se agradece tras tardes de más de 35 grados a la sombra.
La Orquesta Picante ha dejado su huella en la víspera de San Pedro, las fiestas de Zamora tocan a su fin pero ya llega el verano, las piscinas, los embalses y recordar también que la provincia es la más rica en playas fluviales de España. A distrutar tocan.