Desde la Cámara de Comercio y la Ceoe-Cepyme Zamora sienten cierta preocupación por la aplicación por parte de nuestro Ayuntamiento de la nueva ley de Contratos del Sector Público que, como conoces, ha venido a trasponer diversas Directivas de la Unión Europea que tienen como finalidad, entre otras, lograr una mayor transparencia en la contratación pública y facilitar la participación y el acceso de las Pymes a las licitaciones.
En su preámbulo, la citada ley explica la voluntad del legislador de establecer medidas de simplificación del procedimiento y reducción de cargas administrativas introducidas con el objetivo de dar un decidido impulso a las empresas, pero además establece medidas específicas, como una nueva regulación de la división en lotes de los contratos (invirtiéndose la regla general que se utilizaba hasta ahora, debiendo justificarse ahora en el expediente la no división del contrato en lotes, lo que facilitará el acceso a la contratación pública a un mayor número de empresas).
Por ello, el art. 99.3 de la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público establece que "Siempre que la naturaleza o el objeto del contrato lo permitan, deberá preverse la realización independiente de cada una de sus partes mediante su división en lotes..." y que para no hacerlo deberá motivarse, estableciendo como motivos válidos para esta justificación que la división por lotes lleve a un riesgo de restringir la competencia o que se dificulte la correcta ejecución del contrato desde el punto de vista técnico.
Durante las últimas semanas hemos seguido el debate político relativo a la nueva concesión del servicio de recogida de basuras y de limpieza viaria, en el que el ayuntamiento defiende la licitación conjunta de ambos servicios buscando los informes adecuados para justificar su decisión sin infringir la norma, lo que desde las organizaciones empresariales que defendemos nos parece inadecuado por las siguientes razones:
1º) El hecho de no separar los contratos perjudica claramente a las PYMES zamoranas que pudieran estar interesadas en participar en los citados contratos y no perjudica a las grandes empresas, que pueden seguir presentando su oferta a cada uno de los lotes e incluso, si así se
prevé en los pliegos, ser la adjudicataria de más de un lote o de todos los lotes. Por lo tanto, se va contra un precepto de la ley que intenta favorecer la competencia y la concurrencia y que solo beneficia a las grandes empresas.
2º) El licitar separadamente lo servicios de recogida de basuras y de limpieza viaria, ni conlleva un riesgo de restringir injustificadamente la competencia, ni dificulta la correcta ejecución del contrato desde un punto de vista técnico. Es más, como en otros mercados probablemente sea más eficiente que sean empresas distintas las que presten servicios diferentes y la relación calidad-precio sea mayor y, por lo tanto, menos costosa para los zamoranos.
3º) El argumento social que subyace en el planteamiento del equipo de gobierno del Ayuntamiento relativo a exigir en los pliegos que la nueva empresa adjudicataria mantenga los puestos de trabajo, se puede hacer exactamente igual separando los dos servicios, pues únicamente la empresa adjudicataria actual debe notificar al ayuntamiento los trabajadores adscritos a cada servicio o actividad que serán los que tengan que asumir, en su caso, los adjudicatarios.
4º) Tenemos un precedente reciente con el servicio de la O.R.A, los aparcamientos públicos subterráneos y el servicio de grúa, cuyo procedimiento se anul ó y tuvo que volverse al principio para licitarlos por lotes separados, con el consiguiente coste para el Ayuntamiento y perjuicio para toda la ciudad. En este caso puede ocurrir exactamente lo mismo, pues cualquier interesado, empresa o asociación podrían recurrirlo.
En definitiva, entendemos que cualquier actuación que vaya en contra de la ley y de las directivas europeas, perjudica a los intereses de la PYMES zamoranas, limita su participación en este tipo de licitaciones y perjudica al contribuyente zamorano que es quien paga al final el coste del servicio con sus impuestos.