La Asamblea Vecinal de Zamora, surgida de los barrios que nos estaban conformes con el cariz que estaba tomando la FAVE, se reunieron ayer para mandar un ultimatum al Ayuntamiento al, según esta asamblea, mostrar "falta de interés en escuchar sus reivindicaciones".
La fecha tope que pone la AVZ es la del 22 de abril, el martes después de Semana Santa, para que el Ayuntamiento haga caso a sus reivindicaciones sobre autobuses urbanos y libros de texto, entre otros, antes de "tomar medidas, ya sean movilizaciones u otras acciones que consideremos necesarias".