La curva del descenso de la incidencia comienza a ralentizarse. Hoy cae 19 puntos frente a los 74 de la jornada anterior y que permitía a la provincia despedirse de una IA superior a los 500 casos a 14 días. Hoy esa incidencia se sitúa en los 412 casos por los 174 a siete días.
Sí se notifica en cambio un descenso notable de la incidencia en la última semana entre la población mayor de 65 años que cae 40 puntos hasta los 86,7 casos mientras que en las últimas dos semanas la caída es mucho más leve (12 puntos) y se mantiene en los 194 casos. Todos los indicadores de incidencia se mantienen teñidos de morado, si bien se mantienen bastante por debajo de la media de Castilla y León.
El índice de reproducción del virus baja una décima hasta situarse en 0,73, ocho décimas por encima de la media del resto de provincias. Como consecuencia directa del menor número de casos y de la caída de la incidencia, también desciende la positividad de las pruebas diagnósticas realizadas en la última semana que pierde nueve décimas en la última jornada hasta el 11,7%.
El índice de trazabilidad de casos es el mejor indicador y el único que se sitúa en nivel de riesgo bajo al que aspira alcanzar la ocupación de camas de hospitalización por casos Covid que hoy se sitúa en el 5,3%, a poco más de tres décimas de mejorar de nivel. Por último, las UCI encadenan tres jornadas consecutivas en el 15,79 %, porcentaje relativo a un nivel de tensión alto.
