Sí, sucedió en Zamora. No hizo falta desplazarse a Madrid ni Barcelona, lo tuvimos en casa. Y es que Helloween ofreció uno de los mejores conciertos que se han podido ver en nuestra ciudad.
Parecía que el festival se complicaba el jueves y viernes debido a las inclemencias del tiempo. Las lluvias llegaron especialmente el viernes, cuando se vivió un diluvio con cuantías de agua que no se veían desde décadas. El enfado de los asistentes era notorio tras la cancelación y no poder disfrutar de Airbourne, Saratoga o Gigatrón.
Pero el sábado la cosa cambió. Salió el sol, subieron las temperaturas y los grupos fueron desfilando por los dos escenarios de la organización. Crisix y su thrash metal o Gloryhammer con su power metal fueron de los más destacados, pero todo con la vista puesta en las diez y media de la noche, momento en el que Helloween saldría a escena.
Los alemanes demostraron el porqué acudía como cabeza de cartel. La banda de power y heavy metal congregó a miles de personas venidas de toda la geografía nacional e internacional.
Más de dos horas de concierto hicieron que los asistentes saltaran y levantasen sus manos con el característico gesto de los cuernos del metal.
Para poner punto final a la edición de 2023, Dünedain cerró también con un gran concierto, en el que los agradecimientos a la organización no faltaron, recalcando el enorme esfuerzo y sacrificio que conlleva sacar adelante un festival de estas características.
