La Junta de Personal Funcionario de los Servicios Territoriales de Zamora se ha concentrado durante 30 minutos cumplido el mediodía a las puertas de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora.
De esta forma, cerca de dos docenas de trabajadores han mostrado su rechazo total a la actitud adoptada tanto por las Cortes como por la Junta de Castilla y León ante la falta de condena al ataque a Empleados Públicos en Salamanca protagonizado el pasado 5 de junio.
La protesta -secundada por unas 300 personas relacionadas con el sector ganadero charro- que se inició de manera pacífica contra la medida del Ejecutivo nacional y regional de limitación del ganado bovino para tratar de contener la expansión de la tuberculosis entre las cabezas de ganado, fue subiendo de todo y obligó a la actuación del equipo de antidisturbios dejando al menos un herido y un detenido. Además la Delegación territorial de Salamanca sufrió numeroso desperfectos a su entrada en forma de cristales rotos.
Una actitud que, en opinión de la Junta de Personal Funcionario, debería pasar por una actitud de clara condena por parte de los máximos órganos a nivel regional. Jesús Ramos, presidente de de la Junta, recuerda que se trata de trabajadores que "no han hecho más que cumplir con su obligación y su trabajo". En este sentido, exigen a la Junta de Castilla y León que condene por escrito y ante los medios de comunicación y de una manera "inequívoca" cualquier tipo de "atentado, violencia o intimidación a un empleado público en el cumplimiento de su trabajo".
A su vez, solicita que la Junta se persona, a través del órgano que corresponda, en calidad de acusación particular en caso de que las investigaciones judiciales en curso señalen a algún acusado.