El arte flamenco ha deslumbrado con fuerza la noche del sábado en Zamora gracias a la actuación de José Mercé, una de las grandes voces del cante jondo, que conquistó al público dentro de la programación del LIII Festival de Flamenco.
El cantaor jerezano ofreció un espectáculo lleno de garra, sensibilidad y maestría, en el que repasó algunos de los momentos más emblemáticos de su carrera. Desde los cantes más clásicos hasta los temas que han marcado su evolución artística, Mercé supo conectar con los asistentes desde el primer compás, haciendo vibrar cada rincón del recinto con su inconfundible voz.
El público, entregado desde el inicio, aplaudió con entusiasmo cada interpretación, convirtiendo la velada en una auténtica celebración del flamenco en su estado más puro y emocional. Una noche inmejorable que mezcla el arte del flamenco con un entorno inmejorable para la velada celebrada en la Plaza de la Catedral, uniendo el arte del sur con el patrimonio zamorano.
La actuación de José Mercé se ha convertido en uno de los momentos más destacados de la noche, también la de Rancapino Chico, que abrió la velada flamenca y la cerró Belén López, consolidando al certamen como una cita de referencia en la escena cultural zamorana y en el calendario flamenco nacional.
Con noches como ésta Zamora reafirma su compromiso con la cultura y el flamenco, acogiendo con orgullo a artistas de primer nivel y ofreciendo espacios donde la tradición y la emoción se dan la mano.
