Con la pandemia nació un nuevo concepto de librerías que ha cambiado nuestra concepción sobre su utilidad. Abiertas como un espacio de diálogo y encuentro, su uso va más allá del de mera compra de libros, novelas y manuales para convertirse en el nuevo punto de referencia de autores de renombre que buscan la intimidad de estos pequeños espacios frente a las citas multitudinarias como lo son las Ferias del Libro de grandes ciudades.
Bajo este concepto nació Ler Zamora. En los albores de una pandemia -entonces considerada como tal- que nos obligaba a ocultar nuestro rostro bajo una mascarilla, sinónimo de protección, pero también de miedo. Un aura sobre la que se impusieron grandes proyectos culturales que han dinamizado la vida de la capital zamorana. Ler no es el único caso, pero sí el que nos trae a colación como revulsivo y foco de atracción de autores de renombre que cada vez optan más por hacer un hueco en sus apretadas agendas para tomar contacto con los lectores de una manera mucho más real y cotidiana.
Un acto que ha traído al autor barcelonés, Nando López, autor de "Los elegidos" y que apostaba por Zamora para dar inicio a su gira de promoción de su última novela editada por Destino y que ha salido al mercado el pasado 27 de abril. Una obra que da vida a una pareja "poco convencional" durante el franquismo, más en concreto durante los convulsos años 50 para la comunidad homosexual. Una novedad de lucha por la libertad, de reivindicaciones y de amor en todos sus prismas.

El escritor ha ensalzado la labor de librerías como Ler, regentada por Pérez, que apuestan por la "dinamización cultural" y la descentralización de la cultura convirtiendo a Zamora en una auténtica plaza a la altura de otros eventos de gran calado: "Es un fenómeno que, por suerte, está muy en auge y que pese al esfuerzo, crean cultura y también ciudad".
Un espacio como las librerías ofrecen una oportunidad de generar un "encuentro más pausado, cercano y personal porque en otros eventos que también son muy disfrutables, a veces el volumen de gente impide que puedas dedicarle todo el tiempo que precisan". Para el autor, recalar en estos espacios tan acotados supone "un regalo" como un alto frente a la vorágine de una gira que le ha llevado también a la Feria del Libro de Mérida, de Madrid y Santander.
Supone, además, una oportunidad de hablar en profundidad y de intercambiar pareceres con el lector. Más a la hora de explicar una novedad cuya complejidad requiere de una mayor reflexión. "Siempre te nutres de las lecturas que hacen de ti y de los puntos de vista. El escucharlos es una parte esencial de mi oficio porque ofrecen un enriquecimiento bidireccional".