Con el lema "Porque es posible nadie sin hogar", seguirán acogiendo en los diferentes centros de la ONG a las personas necesitadas de un "apoyo específico".
Cáritas ha presentado esta mañana en la casa de acogida Madre Bonifacia la nueva campaña para las personas sin hogar, por la cual continúan ofreciendo sus servicios de alimentación, apoyo y acogida a las personas en estado de exclusión social y sin recursos, como ha informado la directora del centro, María León.
La institución zamorana forma parte de la campaña europea para el fin del sinhogarismo 2010-2015, donde se han realizado las siguientes propuestas: creación de un pacto de estado por la inclusión social; disminución de la burocracia administrativa y las exigencias documentales para las personas con dificultades; el sistema de ingresos mínimos garantizados como derecho; sistema nacional de salud equitativo; derecho a la vivienda incluido en la carta social europea ratificada por el Estado español; y políticas sociales comprometidas que apoyen a las personas y garanticen el acceso a los derechos básicos.
Lejos de encontrarse en fase de mejoría, aseguran que la situación de las personas más vulnerables "ha empeorado considerablemente", ya que la exclusión social ha aumentado un 60% y la tasa de cobertura de la prestación por desempleo se ha visto reducida en un 20%.
El centro recibe diariamente a 50 personas y atiende durante todos los días del año a gente en estado de exclusión social y sin hogar, que pueden acceder al centro a través de Cáritas central, mediante el programa de las parroquias y mediante la Policía Municipal. Madre Bonifacia ofrece calidez a estas personas, además de un apoyo específico y directo y la cobertura de sus necesidades básica, como son la comida, la higiene y el alojamiento, con 18 camas a disposición de los que lo necesiten, que a día de hoy están completas.