En Galicia la venta y consumo de bebidas energéticas a menores de edad quedará prohibida en pocos meses. Algo que estudia ahora el Consejo de Sanidad de Castilla y León eso sí, "una vez que se hayan visto todas los variables de este problema".
Una medida según la Xunta de Galicia que llega porque “una lata de 500 mililitros equivale a dos cafés expresos” y que, por lo tanto, genera impactos en la salud del menor como alteraciones del sueño, nerviosismo, irritabilidad, ansiedad y trastornos cardiovasculares.
Y es que, el ejecutivo gallego ha apuntado que sanitarios de los campos de la pediatría, la endocrinología, la salud mental, la medicina preventiva y la salud pública "han manifestado su preocupación por el consumo de este tipo de bebidas". Un estudio al que ahora se une Castilla y León un el que habrá que “estudiar bien antes de tomar una decisión”.
Cabe recordar que el pasado año, la Asociación Justicia Alimentaria solicitó que la prohibición de venta de bebidas energéticas a los menores de 16 años, así como su publicidad. Así, aseguraron que “as marcas más vendidas de bebidas estimulantes, en sus formatos estándar, contienen dos tazas de café y siete sobres de azúcar, además de entre dos y cinco veces la cantidad recomendada de vitaminas B”.
Según recoge el Informe del Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), la prevalencia de consumo de bebidas energéticas en la población adolescente española del 62%.