Las previsiones se sequía y falta de lluvias y la llegada de los primeros grandes incendios forestales a mediados de marzo han disparado las alarmas, también en Castilla y León.
La situación es tal que la Junta de Castilla y León declarará previsiblemente el próximo viernes, 31 de marzo, la declaración de peligro medio de incendios. Su declaración conllevará el despliegue del operativo “más amplio que nunca en un mes de marzo”, tal y como ha avanzado la delegada territorial de la Junta en Zamora, Leticia García.
“Nunca hemos tenido tantas autobombas, cuadrillas y brigadas helitransportadas en este mes”. La declaración de peligro medio permite activar el trabajo que ya cuenta con dos helicopteros, ocho cuadrillas helitransportadas y de tierra, 14 autobombas, cuatro puestos de vigilancia además de las guardias ya previstas de técnicos y agentes y que se sumará a la disponibilidad de los retenes de maquinaria.
En este sentido, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ya solicitó la semana pasada la convocatoria de una Conferencia de Presidentes sobre incendios en una llamada a la unidad y la colaboración entre el Gobierno central y las Comunidades Autónomas para analizar el actual contexto climático, adelantarse a los riesgos y aumentando la eficiencia en las actuaciones: “Juntos seremos más fuertes”.
