Preparar granizados caseros es una opción práctica y económica. Aunque las versiones industriales pueden contener altos niveles de azúcar y colorantes, hacerlos en casa permite controlar los ingredientes y reducir el contenido de azúcar. Aunque los granizados caseros pueden parecer saludables debido a su base de frutas y agua, es importante moderar la cantidad de azúcar añadido.
Para hacer granizados caseros, hay dos métodos básicos:
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Con Batidora:
- Preparación de Frutas: Trocea las frutas y congélalas en una capa plana para evitar que se congelen en bloque. Una vez congeladas, coloca las frutas en una batidora o procesador de alimentos, añade azúcar y agua fría al gusto, y mezcla hasta obtener la consistencia deseada.
- Con Zumo: Alternativamente, mezcla cubitos de hielo con el zumo de fruta y azúcar en una batidora, o congela el zumo y luego tritúralo.
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Sin Batidora:
- Método Manual: Congela el zumo o bebida elegida y raspa el bloque congelado hasta obtener una textura similar a hielo picado. Deja reposar unos minutos fuera del congelador antes de servir para evitar que esté demasiado frío.
Los granizados pueden elaborarse con una variedad de sabores, como frutas, café o té. Para personalizar los granizados y reducir la acidez de frutas como el limón, se puede mezclar el zumo con agua o añadir hierbas como menta para un toque especial.
Las recetas de granizados caseros pueden incluir:
- Granizado de Limón: Mezcla un limón pelado, cáscara de limón, dátiles, y hielo en una batidora.
- Granizado de Café: Combina agua caliente, café de cereales, azúcar de coco, aceite de coco (opcional), canela, leche vegetal, y hielo en la batidora.
- Granizado de Frutos Rojos: Batir frutos rojos con dátiles y hielo
