La educación ciudadana sobre el VIH, aunque está bastante extendida, flaquea en momentos de tensión o gran preocupación. Por ello, Oliver Marcos, desde el Comité Ciudadano Antisida recuerda los básicos de la infección e incita a hacer valer los derechos sanitarios de quienes quieren hacerse una prueba. O bien a través del sistema sanitario con un análisis de sangre, o bien acudiendo a la sede del Comité a por una prueba de saliva. Esta es la única forma de detectar el VIH que, recuerda, no genera síntomas.
Si el diagnóstico es positivo, comienza el tratamiento para mantener una carga viral en sangre indetectable. Además del acompañamiento médico, una persona portadora de VIH puede necesitar otro tipo de apoyos. Cáritas y Cruz Roja pueden ayudar con la gestión de la medicación o las prestaciones en caso de que se imposibilite el trabajo. Para el acompañamiento emocional por parte de otras personas con VIH, está el Comité y su programa de pares. Oliver necesitaba hablar con alguien que hubiera pasado por lo mismo que él, “y si le digo: tengo miedo, me diga: te entiendo porque yo también lo tuve”.
Desde la organización, apuestan por la información como arma ante las trasmisión. Señalan que campañas como la de “ponte el condón” han quedado limitadas “porque si yo te digo lo que tienes que hacer y por cualquier motivo eso no te encaja, te has quedado sin alternativas”. Con el conocimiento de los recursos disponibles se facilita la prevención: “ya sea el condón, ya sea hacerte prueba, ya sea profilaxis postexposición, ya sea tener una pareja estable”.
Todavía se puede mejorar la atención sanitaria
Donde más dificultades existen, señalan desde el Comité Ciudadano Antisida, es en la atención primaria porque en ocasiones se atraviesa una situación incómoda para los pacientes durante la solicitud de una prueba ETS. A esto se suma el desconocimiento desde la medicina general del recurso de la profilaxis postexposición, la medicación capaz de prevenir la infección hasta 72 horas más tarde de una exposición al virus, y la escasez de tiempo en las consultas. También creen que sería positivo implantar una consulta de infecciones de transmisión sexual en Salamanca porque "la unidad de enfermedades infecciosas está saturada", abarca desde las ETS al coronavirus.
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