El Colegio Universitario de Zamora, sede de la UNED y epicentro de la actividad educativa universitaria en la capital, se encuentra inmerso en una profunda transformación gracias a las obras que está ejecutando la Diputación Provincial.
Una inversión superior a los 700.000 euros está permitiendo modernizar unas instalaciones que, como reconoció este martes el presidente de la institución provincial, Javier Faúndez, “necesitaban una intervención urgente para seguir prestando servicio con calidad y dignidad”.
Más de 3.000 alumnos utilizan a diario el edificio —entre estudiantes de la UNED, de la Escuela Oficial de Idiomas, de Relaciones Laborales o usuarios de la biblioteca—, lo que lo convierte en un espacio vivo, con peso no solo en Zamora ciudad, sino en toda la provincia. “Los edificios envejecen, pero si no se invierte en ellos, dejan de ser útiles. Por eso decidimos acometer estas obras necesarias”, explicó Faúndez durante una visita a las obras.
Reforma integral y soluciones urgentes
Los trabajos se centran en dos grandes líneas de actuación: la sustitución de una parte importante del tejado, que presentaba goteras que ya estaban afectando a la planta donde se ubica la UNED, y una reforma integral interior, con intervención en aulas, accesos, instalaciones eléctricas y espacios comunes.
La actuación está siendo coordinada desde las áreas de Patrimonio y Obras de la Diputación, y se está realizando “planta por planta”, para recolocar a los alumnos afectados y minimizar las molestias.
Un nuevo Paraninfo para Zamora
Uno de los espacios más simbólicos del edificio, el Paraninfo, está siendo completamente renovado. Se han retirado las viejas butacas, eliminado el gotelé de las paredes, modernizado la instalación eléctrica y eliminado la antigua iluminación “de la época de la perestroika”, en palabras del propio Faúndez.
El objetivo es que Zamora cuente con un salón de actos intermedio, con una capacidad menor que el del Teatro Ramos Carrión (que ronda las 600 plazas), pero adecuado para actos académicos, conferencias y actividades culturales de menor aforo. Se dotará de iluminación LED, sonido moderno, tarima nueva, parquet y una imagen completamente renovada, acorde a las necesidades del siglo XXI.
Nuevas aulas y espacios funcionales
Además, la antigua cafetería se ha transformado en dos nuevas aulas, una muestra del dinamismo del edificio y su capacidad para adaptarse a las nuevas demandas educativas. La Diputación busca que el Colegio Universitario sea un lugar de encuentro no solo académico, sino cultural y formativo.
Obras avanzadas y disculpas a los usuarios
Las obras se encuentran ya en una fase avanzada, y la previsión es que estén concluidas a finales de verano. Faúndez quiso agradecer la paciencia de los usuarios: “Sabemos que las obras son molestas para los que vienen cada día, pero eran necesarias. El compromiso era firme, y ahora solo queda que las empresas adjudicatarias cumplan con los plazos”.
Por ahora, no se contempla el traslado de alumnos de Relaciones Laborales a otro espacio. “Nuestro objetivo es hacer compatibles las obras con el uso diario del edificio, y lo estamos logrando”, añadió el presidente.
Inversión presente con mirada al futuro
Esta intervención no será la última. La Diputación ya contempla futuras inversiones para seguir mejorando el edificio, que forma parte de su patrimonio y es una infraestructura esencial para el desarrollo académico y cultural de Zamora.
“Este es un edificio vivo, y como tal, debe adaptarse a las nuevas necesidades. Estamos comprometidos con su mantenimiento, modernización y puesta en valor”, concluyó Faúndez.
