Si algo destaca en su personalidad es su curiosidad innata y esa vitalidad que le acompaña desde su juventud. Sara Pérez Tamames es abogada, opositora, música pero, ante todo, una apasionada por Zamora. Quizá ese sea el título que lleva con mayor orgullo y que se decida a promocionar sin descanso allá donde vaya, a través de la pantalla de su teléfono móvil, desde sus redes sociales o colaborando en los múltiples actos que fomentan la cultura de la ciudad.
Una vocación que Sara lleva muy ligada a su experiencia con la música. Su paso por la Banda de Música de Zamora la unió de manera muy íntima con la Semana Santa. Desde su faceta como presidenta durante años de esta agrupación musical, su cara se convirtió en una habitual de la agenda cultural, pero también de cualquier evento que se precie. Todo sea por llevar el nombre de Zamora hasta el rincón más insospechado, un compromiso que le ha valido el reconocimiento al premio "Ciudad de Zamora" concedido por el Consejo Local de la Juventud en la categoría de embajadora.
"Este galardón supone para mí una inyección de energía para continuar colaborando en las tareas que puedan contribuir a la promoción de mi ciudad, y hace que aumente si cabe el cariño que, desde la prudencia de quien tiene mucho que aprender, intento poner en las pequeñas cosas que humildemente hago", ha señalado Sara Pérez. Un cariñoso mensaje de agradecimiento no sólo a los impulsores de estos premios que este viernes hicieron su estreno de largo, sino a todos los que le han impulsado en este afán por impulsar la imagen de la ciudad.
Este galardón, que premia el esfuerzo, la dedicación y las labores relacionadas con la promoción del territorio ha tenido muchas caras ilustres y supone el reconocimiento a quienes luchan contra las manidas frases que alientan a los jóvenes a huir de una tierra en la que "no hay futuro".
Porque futuro hay y mucho. Así lo demuestran rostros como el de esta zamorana que siempre hace un hueco entre sus largas jornadas de estudio para hacerse visible entre las procesiones, los concursos de bandas, los programas especiales y debates. Rostros de profesionales que, lejos de renegar, se implican de lleno en la promoción de una ciudad que les ha dado la vida y continúan haciéndolo día a día. Rostros que, como en el caso de Sara, son la viva imagen de la lucha incansable y que le ha hecho merecedora de un cariño a todas luces merecido.
"Me hace muchísima ilusión recibir este premio en casa, en la ciudad del alma, que decía Claudio Rodríguez en sus versos cuando escribía a Zamora, pues siempre me he sentido muy zamorana. Lo recibo con el inmenso honor que supone poder seguir contándole al mundo que Zamora es una ciudad maravillosa".
