El socialista José Manuel Prieto Ramos, Alcalde de Galende se niega a entregar las cuentas municipales desde que llegó a la Alcaldía, pese a las continuas reclamaciones y escritos del grupo municipal ahora DECiDE pidiéndoselas. Tampoco cumple con la obligación legal de presentar la cuenta general del Ayuntamiento al Consejo de Cuentas de Castilla y Léon, y en el tiempo que lleva de Alcalde gobierna con un presupuesto municipal del PP aprobado en el año 2013, con el apoyo asimismo de un concejal del PP. Vamos para cinco años sin presupuestos municipales.
Hasta la fecha y exceptuando el IBI, no ha puesto al cobro ninguna de las tasas y tributos municipales, tales como recogida de basuras, agua, terrazas, puestos del Mercado del Puente, etc, pese a que el Ayuntamiento de Galende es uno de los más endeudados de Zamora. Una deuda escandalosa que no acaba de aclarar porque detrás esconde su nefasta gestión, su misma incapacidad, y porque todo apunta a que la ha incrementando paulatinamente a cambio de nada, pues la ineficacia, la falta de equipamientos y servicios básicos y esenciales a los que no presta atención, ni cuidados, la pérdida irresponsable de subvenciones y ayudas, etc, etc, han contribuido a un vertiginoso descenso de la población. De nueve concejales que somos, en las próximas elecciones serán siete. Esto da una idea de cómo se contribuye al vaciamiento de los pueblos.
A estas alturas, desgraciadamente, el Ayuntamiento de Galende es un Ayuntamiento fallido multiplicador de la despoblación. No hay nada, no hay equipamientos, no hay servicios, no hay incentivos y no hay ideas ni condiciones favorables para que los jóvenes y los mayores no abandonen los pueblos. Juega la cortedad de miras y se han impuesto definitivamente los modos autoritarios propios de los incapaces: los contratos de trabajo a dedo, los contratos de obras a dedo, los contratos de suministros y servicios a dedo, las licencias a dedo y la gobernanza a base de caciquismo y decretazos. Decretazos y caciquismo. Estas prácticas autoritarias y antidemocráticas contrarias a la buena gestión, han instalado al Ayuntamiento de Galende en la más absoluta opacidad guiado por una clamorosa falta de eficacia y trasparencia en la gestión de los recursos e intereses municipales. El único logro en el haber de este Alcalde es haber empeorado la gestión del popular Jesús Villasante. Y ya es decir.