Ucrania avanza hacia el este del río Dniéper tras la toma de la ciudad de Jersón, punto estratégico para Moscú pero del que se ha visto obligado a retirarse ante su incapacidad para avanzar sobre el territorio reconquistado por el ejército nacional.
Una decisión que supone un importante viraje en la evolución de la guerra de Ucrania desatada el pasado 24 de febrero . El presidente del país, Volodímir Zelensky, lo ha calificado de "día histórico" en el que las tropas ucranianas han accedido y colocado la bandera nacional en la principal plaza de la ciudad.
La población ha recibido a los militares entre aplausos y vítores en un ambiente festivo. Banderas y pancartas han salido a relucir para celebrar su llegada, si bien desde el Gobierno ucraniano solicitan cautela a los ciudadanos hasta que confirmen la ausencia total de militares prorrusos. Las tropas ucranianas aseguran que ya han liberado 41 asentamientos en la región mientras Moscú sostiene que ya ha trasladado al completo a sus tropas al otro lado del río Dnieper.
Su cometido será ahora desminar la zona y eliminar todos los símbolos rusos así como cualquier rastro de la ocupación en las calles y edificios. Mientras, Moscú ha anunciado bombardeos en la zona y han nombrado a la ciudad de Gueníchesk nueva "capital administrativa temporal", del territorio ucraniano.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba considera que la victoria de la guerra es "solo cuestión de tiempo". "En nuestra guerra defensiva contra el enemigo, Ucrania va a ganar, es cuestión de tiempo (...) Cada centímetro de Ucrania será liberado", ha asegurado en su parte diario de la guerra que hoy atraviesa su día 262.
Latest Defence Intelligence update on the situation in Ukraine - 12 November 2022
— Ministry of Defence 🇬🇧 (@DefenceHQ) November 12, 2022
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