Menos precocinados y más comida fresca en los comedores escolares de España

El nuevo decreto exigirá frutas y verduras diarias, limitará bebidas azucaradas y fomentará productos ecológicos
Foto archivo comedor escolar
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El Ministerio de Derechos Sociales y Consumo ha propuesto una nueva normativa para los comedores escolares con el objetivo de reducir el consumo de alimentos precocinados. La medida establece que los centros educativos solo podrán ofrecer un plato de este tipo al mes. Entre los productos afectados se encuentran pizzas, croquetas, empanadillas y frituras. La regulación busca mejorar la calidad de la alimentación infantil y promover hábitos saludables.

Esta iniciativa responde a preocupantes datos sobre la alimentación infantil en España. Según el Estudio Aladino, el sobrepeso y la obesidad afectan especialmente a niños de familias con menores ingresos. Además, el Plan Nacional de Control de la Cadena Alimentaria indica que un tercio de los comedores escolares sirven cuatro o más platos precocinados al mes. Con esta medida, se busca reducir estos porcentajes y garantizar menús equilibrados.

El decreto también contempla otras restricciones para mejorar la calidad nutricional en los centros educativos. Se prohibirá el consumo de bebidas azucaradas y se promoverá el consumo diario de frutas y verduras. Asimismo, al menos el 45% de las hortalizas deberán ser de temporada, y un 5% del presupuesto de los comedores se destinará a productos ecológicos. Estas acciones pretenden fomentar una dieta equilibrada y sostenible.

Otra medida clave es la regulación de las máquinas expendedoras y cafeterías en los colegios. Se restringirá la venta de productos con altos niveles de azúcar, incluidos bollos industriales y bebidas energéticas. Además, se prohibirá la publicidad de estos productos en las máquinas y su instalación en zonas accesibles para alumnos de infantil y primaria. Con ello, se pretende reducir el consumo de alimentos ultraprocesados en el entorno escolar.

Los datos oficiales reflejan la necesidad de estas medidas. En 2023, solo el 31,8% de los centros educativos cumplieron los criterios nutricionales de la OMS, frente al 57% en 2021. Con esta regulación, el Ministerio de Consumo espera revertir esta tendencia y garantizar que los comedores escolares ofrezcan una alimentación de calidad, basada en productos frescos y saludables.

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