El Gobierno prepara un plan de alertas que quiere consensuar con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial de Salud, que tendrá lugar este jueves y del que hablaba Verónica Casado este martes. También el Ministro Illa apuntaba esta mañana la posibilidad, lo que está claro es que el camino está más que andado hacia un estado especial de nuevo, España no corta el contagio y sigue en plena curva de ascenso.
Castilla y León ya anunció mediante el Vicepresidente y la Consejera de Sanidad que CyL tenía listo un plan en tres niveles para en caso de necesidad ponerlo en práctica ya que los 500 contagios por cada 100.000 habitantes no es una máxima cuando también se habla de más de un 35% de ingresos UCI o de de más de un 10% de contagios positivos en PCR.
En la reunión de este jueves se planteará el plan con cuatro niveles de riesgo y una serie de medidas restrictivas asociadas a cada nivel.
El Gobierno plantea esta alternativa al estado de alarma vigente en nueve municipios de la Comunidad de Madrid hasta el próximo sábado, así si Madrid quedaría en el nivel 4 de riesgo extremo junto con otras comunidades, como Aragón y Navarra, donde su presidenta ordenó ayer el cierre perimetral y la clausura de bares y restaurantes también se planteará el toque de queda.
Aunque el toque de queda sería una solución a caballo entre las medidas restrictivas que afectan sobre todo a los bares y restaurantes, este toque de queda ha de estar sujeto también al estado de alarma que vuelve a resonar entre lo que pueda pasar en muy breve tiempo y con los contagios disparados en media España.
Esta medida se aplica ya en Europa y es en Francia y Bélgica tanto por ciudades como en todo el territorio nacional, las que aplican estas medidas también en Italia aunque las decisiones las toman las regiones. En París se prohíbe la circulación y el movimiento de los ciudadanos de 9 de la noche a 7 de la mañana y en Bélgica desde las 12 de la noche hasta las 5 de la mañana