La Agencia Europea del Medicamento "sigue vigilando" los coágulos sanguíneos muy raros con bajo nivel de plaquetas que se han producido tras la vacunación con las dosis de AstraZeneca, con el objetivo de proporcionar "más contexto" de este riesgo. Al tiempo, estudiará una recomendación sobre la inyección de una segunda dosis a quienes hayan recibido la primera y sigan pendientes de ese segundo pinchazo necesario para completar el proceso de inmunización.
El Ministerio de Sanidad cambió el criterio y decidió destinar las dosis de AstraZeneca a la población de entre 60 y 69 años. La primera dosis comenzó a administrarse a profesionales y trabajadores esenciales -como policías, bomberos y docentes- menores de 60 años que ahora se han quedado en el limbo. Hasta el momento, 2.154.675 personas han recibido la primera dosis de la vacuna de AstraZeneca y permanecen pendientes de la segunda.
La revisión que realizará el comité de medicamentos humanos (CHMP) valorará la recomendación de continuar con la inyección de una segunda dosis del fármaco británico en aquellas personas que ya han recibido la primera, puesto que, según apuntan las investigaciones, los efectos secundarios han ocurrido principalmente tras el primer pinchazo.
En un comunicado, la EMA asegura que llevará a cabo una “revisión de los datos de vacunación y de epidemiología” en el uso de AstraZeneca y reitera que “considera que los beneficios generales de la vacuna continúan superando los riesgos en las personas que se vacunan”.
De acuerdo con una petición de la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Stella Kyriakides, tras la reunión de la semana pasada con los ministros de Sanidad de la UE, la EMA ha detallado que "está llevando a cabo una revisión de los datos de vacunación y de los datos sobre la epidemiología de la enfermedad, incluyendo las tasas de infección, las hospitalizaciones, la morbilidad y la mortalidad".
