Vestidos de tratantes de ganado y acompañados de una burra, los miembros de la cofradía del Cencerro han colgado los hábitos en este 2021 ante una pandemia que ha roto esquemas y dejado a Zamora sin una tradición que logró el "Alma Páter" de la Cofradía, Ángel Centeno, un hombre que desde 1962 ha dado todo por una cofradía entrañable y muy zamorana.
Los miembros de esta cofradía reparten roscas y alegría por toda la ciudad, pero este año no puede ser, Ángel Centeno comentaba con este diario la fatalidad del año y sobre todo la maldita pandemia que ha dado al traste con una tradición que inició en 1962 cuando los hermanos "burros" recorrían las calles zamoranas tal día como hoy, en la festividad de San Antón.
La Cofradía del Cencerro, o de los "burros", que integrada por una cincuentena de socios reparte roscas de pan, alegría y buen humor por toda la ciudad ataviados con un jubón, una boina y un pañuelo blanco, a la manera de los antiguos tratantes de ganado y acompañados por su inseparable burra, este año no saldrán, no habrá acto de nuevas incorporaciones ni tampoco se leerá la oda al burro, ese hermano que cada año acompaña a todos los cofrades.
Ángel Centeno sigue siendo el hermano mayor "burro" de la Cofradía del CencerroEnero, este año tampoco tendremos como protagonistas a los los Dulzaineros de la Calle Real, de Soria, que hace más de dos décadas que acompañan a los hermanos burros en esta lid. Ángel Centeno (el hermano o "burro" mayor no ha podido más que suspender esta entrañable jornada ante lo que la pandemia deja, esta tradición no se perderá y el año que viene los hermanos burros volverán con más ganas si cabe a convidar a las roscas que en esta jornada son postre y aperitivo de decenas de zamoranos. La sanantonada tendrá que hacerse en casa con los 4 que dejan según la Junta por familia, y esperemos que el amigo burro no sufra los avatares de estas restricciones que a todos tienen locos.
El año que viene será el del desquite el del 60 aniversario y así cada 17 de enero ese grupo de hombres ataviados con la jubona de tratantes, pañuelo blanco al cuello y boina en la cabeza, recorrerán las calles acompañados por una burra e irán repartiendo las tradicionales roscas de pan, alegría y buen humor entre todos los que presencien el 2022 el paso de tan singular comitiva, que seguro será grande como todos sus hermanos.
Gracias Ángel por mantener tradiciones que solo aquí en Zamora y a la buena gente le salen de los poros.
Y aunque este año maldito el 59 de todos, no haya salido el "biche" el espíritu de la Cofradía del Cencerro sigue siendo el mismo el de festejar a San Antón y hacer partícipes a los zamoranos de su alegría.
No los busquen hoy a las 19:30 que total poco podrían hacer con tan solo media hora de juego en las calles de Zamora, San Torcuato hoy echará de menos la algarabía y el alboroto de tanta buena tradición.
