La mañana de este martes 12 de noviembre, el tradicional mercadillo de Zamora ha estrenado su nueva ubicación temporal en la calle Antón de Centenera, extendiéndose hacia el Camino Bodega del Torrao. Este cambio, anunciado por el alcalde Francisco Guarido, se debe a las obras de acondicionamiento y mejora en la Avenida Requejo, las cuales afectan la travesía de la Carretera ZA-12. La reubicación busca garantizar la seguridad vial, la correcta ordenación del tráfico y el acceso al Hospital Virgen de la Concha.
En su nuevo emplazamiento, los puestos se distribuyen a lo largo de una calle despejada, rodeada de vegetación y con vistas a las afueras de la ciudad. En las imágenes capturadas hoy, se observa cómo los comerciantes han montado sus puestos de ropa y otros artículos sobre mesas sencillas, con algunos carteles de precios a la vista. A pesar del cambio, la afluencia de clientes parece constante, mientras los compradores recorren las filas de productos bajo el cielo despejado, en una atmósfera tranquila y rural.
Un cartel de "Atención, calle cortada" indica la limitación temporal del tráfico en la zona, y los vendedores, adaptándose al nuevo espacio, han logrado mantener la esencia de este mercadillo semanal, que sigue siendo un punto de encuentro para los zamoranos.
