Mauro Galván, Álvaro Báez y Toribio lideran el botín del deporte base zamorano en un descenso sofocante

La clásica regata entre Fresno de la Ribera y Zamora reunió a cerca de 400 palistas
48º Descenso Ibérico del Duero
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El calor fue el gran protagonista del 48º Descenso Ibérico del Duero, celebrado este sábado 28 de junio entre Fresno de la Ribera y la capital zamorana. Con temperaturas cercanas a los 40 grados, la regata se convirtió en una prueba de resistencia extrema para los cerca de 400 palistas que se atrevieron a desafiar al río Duero bajo un sol asfixiante. A pesar de las condiciones, la jornada fue una auténtica fiesta del piragüismo, con un gran ambiente en las orillas y excelentes resultados para el club zamorano, que firmó una actuación notable al concluir en quinta posición por equipos entre los 27 clubes participantes.

La prueba, de carácter nacional, volvió a ser uno de los actos centrales del programa deportivo de las fiestas de San Pedro. Desde el primer palazo en Fresno de la Ribera hasta la meta en la Isla de las Pallas, los participantes recorrieron 17 kilómetros marcados por el esfuerzo, el calor y el espíritu competitivo. En lo deportivo, los palistas locales brillaron con luz propia, demostrando el buen estado de forma de la cantera zamorana.

48º Descenso Ibérico del Duero
48º Descenso Ibérico del Duero

Entre los nombres propios de la jornada destacó Nikol Georgieva, que se colgó el oro en la categoría mujer juvenil K-1 con una regata sólida y sin fisuras. También subió a lo más alto del podio Amalia Toribio, vencedora en K-1 sub-23 femenino. La pareja formada por Mauro Galván y Álvaro Báez logró una valiosa medalla de plata en K-2 juvenil masculino, mientras que Lydia Rodríguez también fue segunda en K-1 cadete femenino. El bronce llegó en la modalidad mixta absoluta de K-2, donde los hermanos Adrián y Daniela Diente completaron una regata muy meritoria ante rivales de gran nivel.

Además de estas preseas, otros palistas zamoranos se quedaron a las puertas del podio. Maxi Vega finalizó quinto en la categoría K-1 cadete masculino, y Millán Álvarez firmó un sexto puesto en juvenil K-1, evidenciando que el futuro del piragüismo en Zamora goza de buena salud. Desde el club anfitrión destacaron el esfuerzo titánico de todos los deportistas y agradecieron el apoyo de quienes han hecho posible este evento, con una mención especial a MotoWearShop por su colaboración incondicional.

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